Voluntario del MVC: “Estoy aquí para que la democracia sea limpia”
Ricardo Camay de Jesús, de 20 años, viaja desde Morovis para trabajar sin paga en el escrutinio.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 5 años.
PUBLICIDAD
Ricardo Camay de Jesús, tiene 20 años, estudia un bachillerato en Educación Física y es uno de muchos de los voluntarios que tiene el Movimiento Victoria Ciudadana (MVC) en las mesas de escrutinio en el Coliseo Roberto Clemente, en San Juan.
El joven, que cursa su segundo año en el recinto de Manatí, de American College, carga con su laptop para tomar de forma virtual sus cursos, algunas veces desde el propio Coliseo y hacer a la vez su voluntariado en el proceso de escrutinio.
“Estoy aquí para defender quién nos va a representar en el Capitolio, para defender nuestras necesidades. Estoy aquí para que la democracia sea limpia. Que todo surja como debe ser”, afirmó en entrevista con Primera Hora en uno de sus recesos, en el Coliseo.
“No me arrepiento del sacrificio que estoy haciendo. He adquirido mucho conocimiento de personas mayores y de jóvenes. Me encanta estar aquí”, indicó. “Hay veces que he tenido que pedir un break para estar presente en mis clases en video o Zoom, pero hasta ahora los profesores entienden”, expresó el joven, quien es árbitro de baloncesto y por la pandemia del COVID-19, no ha podido trabajar.
“No hay juegos, no hay torneos, así que estoy desempleado”, relató Camay de Jesús, quien llega temprano al Coliseo desde Morovis, donde vive con sus padres, aunque algunas veces pernocta en San Juan, con unos tíos o con amistades.
En el Coliseo, Ricardo no recibe salario por su labor, a diferencia de muchos otros funcionarios electorales, que son empleados de distintas agencias del Gobierno y los partidos políticos los mantienen allí en lo que se conoce como destaque. “Aquí la mayoría, excepto Proyecto Dignidad y nosotros, tienen destaques. Los envían los alcaldes o vienen desde el Capitolio”, sostuvo el universitario.
“Yo lo hago como quien dice, por amor al arte, pero porque me gusta”, dijo para agregar que ha trabajado en las mesas de escrutinio, en la Junta Administrativa de Voto Ausente y Adelantadon (JAVAA), en el cuadre de actas y como supervisor de líneas.
“Estoy aquí desde el 5 de noviembre y desde hace unos días me pongo un gorrito y cuando soy supervisor ya casi todos los partidos me conocen por el muchacho bajito del gorrito. En medio de la pandemia he podido conocer mucha gente buena, como si los hubiera conocido de hace mucho tiempo”, narró. A pesar de las tensiones partidistas, dijo que le ha impresionado bien el trabajo en equipo que hacen los funcionarios electorales.
El funcionario del MVC dijo que por el riesgo del COVID-19 los trabajos en el Coliseo se han complicado, pues muchos observan el protocolo que impone la mortal enfermedad, pero otros bajan la guardia. “Nosotros mismos tenemos que limpiar las mesas cuando llegamos y alguna gente se baja las mascarillas, como si nada, para hablar. De verdad que no es momento para actuar como si nada estuviera pasando”, indicó.
Dijo que en el Coliseo les administran pruebas serológicas y muchos se las hacen diariamente, pero otros no. Además, de esas pruebas de sangre, indicó que él por su cuenta, una vez a la semana, se hace pruebas moleculares en un laboratorio “para asegurarme que estoy negativo”.
Para la tranquilidad suya y de sus familiares, relató que observa un estricto protocolo tanto en el Coliseo como cuando llega a su casa. Contó que se embadurna de alcohol y antes de bajarse, en el mismo carro se pone otra ropa, mientras la que se quita la echa en una bolsa plástica. “La que me pongo en el carro, aunque la haya tenido solo por unos segundos, también la echo al hamper y enseguida me meto a bañar”, detalló Camay de Jesús.
Dijo que llegó al MVC a través del candidato a representante del distrito 12 a quien conoció entre julio y agosto pasado. “Lo contacté por las redes, empecé a caminar y a hacer campaña con él y así me incorporé al MVC. Trabajé como funcionario electoral y posterior a las elecciones, llegué hasta el Coliseo, ante el llamado de Alexandra Lúgaro y Manuel Natal de que necesitaban gente aquí y en JAVAA”, contó.
“La mayoría en el Movimiento somos funcionarios voluntariamente, gratuitos, no somos empleados de la CEE, ni tenemos destaque. Estamos ahí porque el Movimiento hizo su llamado y nosotros respondimos. Queremos velar que el proceso sea correcto y transparente, aunque tengamos a los partidos principales en contra”, sostuvo el joven funcionario electoral.