Habichuelas congeladas
“A todas las que, como yo, viven ajetreadas y frecuentemente les falta el tiempo para poder hacer una comida completa, nos conviene de vez en cuando hacer estas maromas”

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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Nada como la comida de nuestras casas, esa sazón es insustituible. Es más nutritivo y permite que la familia se siente a la mesa a conversar y pasarla bien. También nos ahorramos el pesito, que siempre viene bien, sobre todo en estos tiempos tan difíciles.
Aunque disfruto muchísimo cocinar, no soy la más experta del mundo y no siempre me da el tiempo. Muchas veces el día se me complica y me quedo con las ganas de prender las hornillas. Por eso busco planes alternos para evitar hasta lo último tener que salir a comprar comida.
En ese ánimo he desarrollado algunos mecanismos de defensa, siendo las habichuelas congeladas uno de mis favoritos.
Cuando sé que voy a tener una semana complicada en el trabajo me aseguro de no acostarme a dormir el domingo sin antes sacar la olla y comenzar a preparar mis habichuelas de la semana.
Así como lo lee.
Salsa, sofrito que ne envía titi Zulma, habichuelas de lata y mucha calabaza como les gusta a los de casa. Después busco cinco bowls de tamaño mediano, los lleno hasta el tope de habichuelas guisadas y para el freezer. Con eso resuelvo para la comida de lunes a viernes.
Sí, en casa podemos comer los cinco días arroz y habichuelas felices de la vida.
Llego, preparo un arrocito blanco y algún pollito o algo que se me ocurra para la mestura. Hiervo alguna vianda o frío maduritos. Si estamos en temporada de aguacate entonces el juego cambia y aquello parece gourmet.
Como hago ocasionalmente, puse una foto de los cinco bowls llenos de habichuelas en Facebook y los comentarios no se hicieron esperar.
Por un lado algunas me cuestionaron que cómo podía hacerle una cosa así a las habichuelas, que merecen ser guisadas a diario.
Por el otro lado, la inmensa mayoría levantó la mano para unirse al club de las habichuelas congeladas.
Eso sí... hay muchas variantes: bowls de cristal, bolsitas ziplock y muchas otras recomendaciones de la cuales tomé nota.
La verdad es que funciona y resuelve.
Que si el sabor se afecta me preguntaron algunas. Puede que se afecte un poco, pero mientras más ganas le pongas al guiso el domingo, mejor sabor tendrá el último bowl del viernes.
A todas las que, como yo, viven ajetreadas y frecuentemente les falta el tiempo para poder hacer una comida completa, nos conviene de vez en cuando hacer estas maromas, pues sentarnos a la mesa con la familia tiene un valor incalculable.
Así que, si hay que inventar para quedarnos comiendo en casa, ¡hay que inventar!
Posee un bachillerato en relaciones laborales de la UPR, Río Piedras y una maestría en administración de empresas de la Universidad del Turabo. Comenzó a destacarse a principios del 2000 como comediante y animadora de radio y televisión. Desarrolló una sólida carrera como presentadora en programas tales como "Pa' que te lo goces", "Anda pa'l cará" y "Dando candela". En el 2014, comenzó su propio programa de TV, "Alexandra de noche" y al presente conduce "Alexandra a las 12". En 2017 incursionó al teatro con su stand up comedy "La casi casi primera dama", reconocido como uno de los más exitosos de todos los tiempos al vender más de 50,000 boletos en sobre 50 funciones. Se ha destacado además, como productora de teatro. Alexandra está casada con el Dr. David Bernier, excandidato a la gobernación de Puerto Rico, y es madre de Adrián y Miranda.
Sin maquillaje
La actriz y presentadora comparte varias de sus experiencias como madre, comunicadora y promotora de la cultura.