Hoy es martes de elecciones, un día muy importante. Debemos acudir a las urnas a ejercer nuestro derecho al voto, participando de la democracia de manera responsable y cívica. Cómo era de anticiparse, la mayoría de los escritos y reportajes de hoy son de política, incluso, llamé al periódico para ver si mi columna seguía en pie y, para mi sorpresa, aquí está publicada. ¡Qué bueno!

Pero yo no quiero hablar de política, todo lo contrario. Hablemos de lo que viene después, las navidades. Nunca había esperado con tantas ansias un periodo navideño. Nos hace falta, como nunca antes, comenzar a vivir esa alegría de la Navidad para compensar los sinsabores del 2020. Tendremos las dificultades que provoca la pandemia, por lo que será una celebración ajustada a la realidad, pero celebración al fin, debemos disfrutarla.

Hay que poner el arbolito temprano y decorarlo con todas las bombillitas y guirnaldas que le quepan. Nuestros trovadores y cantantes navideños espero se boten con su creatividad, para regalarnos esas canciones que siempre nos alegran la vida. Todo el ejercicio que he hecho durante el año es para no sentirme mal ahora metiéndole mano a los pasteles y al lechón que tanto me gustan. Me voy a asegurar de disfrutar como nunca antes de este periodo navideño. Celebrar las navidades no es hacer grandes fiestas, que esta vez debido al COVID-19 deberíamos evitar. Celebrar las navidades es asumir una actitud de alegría y felicidad. La música, la comida, el arbolito, Santa Claus, Los Reyes Magos, las parrandas, nos ayudan a generar ese estado de ánimo único de este periodo. Pero lo importante es la actitud. Ponga su arbolito temprano, comience a escuchar música navideña, pero sobre todo, permita que el espíritu navideño entre en usted. Resuelva conflictos con vecinos, amigos y familiares. Tome decisiones importantes que lleve tiempo postergando y que representen cargas para su estado de ánimo. Comencemos en cero y regalémonos de Navidad la alegría que todos nos merecemos.

Tenemos que comenzar urgentemente con estas navidades, nos hacen falta. Así que vaya a votar hoy por el candidato y fórmula de su predilección, y cuando llegue a su casa comience a celebrar las Navidad. ¡Que sean estas, realmente, las navidades más largas y alegres del mundo.