Me fascinan los road trips largos. Nada como viajar a otro país y pasar días, tal vez semanas , en la carretera. Para mí, un road trip es como sentarse en el asiento delantero de un carro, una guagua o un Jeep y simplemente ver todo un continente desfilar frente a uno. El más largo de mis road trips fue el pasado mes de septiembre por los estados del suroeste.  A lo largo de más o menos 10  días visité seis estados y recorrí 3,431 millas.

Fueron muchos días y distancias bien largas. Sin embargo, eso es nada comparado al épico road trip que dio una pareja colombiana que en días recientes estuvo de visita en la Isla. Jorge Enrique (Kike) y Melissa, de la ciudad de Cali, a bordo de una van Volky dieron un road trip de proporciones épicas. A lo largo de cuatro años y medio le dieron una vuelta a Suramérica, subieron por Centroamérica, le dieron otra vuelta a Norteamérica, atravesaron Canadá y llegaron a Alaska.


Según me contaron, la idea de ambos era tomar una sabática de su trabajos (abogado él, médica, ella) por seis meses y coger carretera durante ese medio año. Pero cuando esos seis meses se acabaron, se dieron cuenta de que les estaba gustando tanto la aventura que simplemente decidieron no regresar a su casa ni a sus trabajos, sino seguir manejando.

La tercera coprotagonista de esta aventura es la Van Volky a la cual llamaron Lunita, ya que según Kike, al igual que la luna, fue testigo silente y cómplice de todas sus aventuras.


Como parte final de su road trip, Kike y Melisa trajeron a Lunita a Puerto Rico. Y adivinen qué. Mientras que ellos regresan a Colombia a retomar sus vidas (y planificar el próximo road trip por Asia y Europa), Lunita se queda en Puerto Rico como residente. La guagüita aventurera será ahora parte de la exhibición permanente del museo Volkyland, en  Yauco.


Pero, antes de dar ese corto viaje al pueblo cafetero sureño, Lunita estará hasta el domingo en Plaza las Américas participando de la exhibición Flower Power, dedicada a los Volkswagen y Porsche.