"Despacito, quiero desnudarte a besos despacito"
"Así canta Luis Fonsi en su nueva canción con Daddy Yankee, canción que deseo todos y todas escuchen con atención y, por supuesto, disfruten".

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
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“Despacito... Pasito a pasito, suave, suavecito, nos vamos pegando, poquito a poquito, que le enseñes a mi boca tus lugares favoritos (favorito, favorito baby)”. Así canta Luis Fonsi en su nueva canción, Despacito, con Daddy Yankee. Una que nuestra querida y bella Zuleyka sandunguea muy bien, con total destreza de erotismo y fina seducción. Canción que deseo todos y todas escuchen con atención y, por supuesto, disfruten.
“Me voy acercando y voy armando el plan, sólo con pensarlo se acelera el pulso. Ya, ya me está gustando más de lo normal. Todos mis sentidos van pidiendo más. Esto hay que tomarlo sin ningún apuro, despacito”.
Así cantan con sonido rítmico y pegajoso, uno que me invita a detenerme justo ahí. Siempre es mi sugerencia cuando de hacer el amor, o mejor dicho, tener sexo, se trata. Hay que ir despacito y en el camino detenerse en cada fase del ciclo sexual, a saber: deseo, excitación y orgasmos. Luego, todos estaremos listos y listas para empezar otra vez. El armar un plan es bien importante. Necesitas saber qué hacer y cómo hacerlo para ejecutarlo y esto aplica a todo lo que quieras conquistar en tu vida, incluyendo un buen sexo.
En mi teoría, la que emerge tras investigar la experiencia de disfunción orgásmica en un grupo de mujeres puertorriqueñas, se llama ansiedad ejecutoria. Ansiedad que también está presente en los diversos tipos de trastornos sexuales de ellos y ellas. Desde falta de deseo, excitación y, por supuesto, orgasmos, hasta dolor, cero o poca lubricación, eyaculación precoz, falta de erección o las otras tantas que ya están diagnosticadas y para las cuáles existe solución. Ansiedad que comienza en todo lo que va pensando la persona, en su mente y calladita, en su diálogo interno, que la va predisponiendo a ese acto sexual. Si las experiencias previas han sido buenas, la ansiedad será favorable y sirve para que en su mente la persona se vaya preparando al banquete. Si no ha sido tan agradable y digna de recordar y recrear, entonces, desde ahí comienza el calvario para esa persona y sí, en ambos casos será para que te acuerdes si no estás conmigo tal cual cita la canción.
“Despacito, quiero desnudarte a besos despacito. Firmo en las paredes de tu laberinto y hacer de tu cuerpo todo un manuscrito, sube sube, sube, sube, sube”, sigue cantando Fonsi con su corillo pegajoso que, en una fase de excitación, debe estar provocando una muy buena respuesta. Esta fase es la que me garantiza los orgasmos. Un buen trabajo, despacito, en esta fase asegura los resultados de todas las partes. Es cuando ambos cuerpos están tan compenetrados y la química es tan perfecta que se puede ver ese hilo de energía subiendo al infinito y se logra tocar el cielo con la mano aquí en la tierra. “Que le enseñes a mi boca tus lugares favoritos”, dice la letra y yo digo ¡wow!
No tan sólo porque imagino una rica travesía húmeda, sutil, que recorre todo el cuerpo y eriza toda la piel, sino también porque esa boca enuncia unas palabras poderosas y comparte de corazón lo que quiere y cómo lo quiere con lujo de detalles. La fase orgásmica y el resto de la canción las dejamos para el próximo lunes, ¿te apuntas?