Nadie esta exento de sentirse mal emocionalmente en algún momento de su vida, de estar ansioso o deprimido. Nadie es lo suficientemente fuerte como para decir que jamás pasara una situación de vida en que sus emociones se vean afectadas. Lamentablemente aun reconociendo esto, el estigma hacia los pacientes de salud mental y hacía las personas que han padecido de alguna crisis emocional está latente en la sociedad.

Locos, desajustados, débiles, son algunos de los epítetos a los que se ven expuestos los que por una enfermedad o por un fuerte estresor de vida buscan ayuda. La pasada semana pudimos ver en los medios noticiosos el caso de Selena Gómez quien en más de una ocasión ha estado hospitalizada en un centro psiquiátrico, la anterior un “loco” tiro por el segundo piso a un hombre en Plaza las Américas, así podríamos seguir mencionando casos.

La salud mental es un asunto serio y lamentablemente se habla de ella cuando casos como estos suceden. Faltan campañas, falta educación y sobre todo falta compasión.

Si bien es cierto que hay personas con trastornos mentales con un diagnóstico realizado por un profesional de la salud mental hay muchas personas que atraviesan malestar emocional severo y no se atreven a verbalizarlo por el estigma que la sociedad le impone.

¿Qué podría hacer que una persona sienta un malestar emocional intenso, ansiedad o depresión?

Algunas razones podrían ser:

-Pérdida de empleo
-Luto
-Ruptura de una relación
-Problemas económicos
-Discusiones familiares
-Acoso psicológico laboral
-Problemas con hijos

Por otro lado, hay personas que padecen de condiciones psiquiátricas que a su vez, aun siendo tratados pueden mostrar recaídas y necesitar ayuda.

Pacientes de depresión, Trastorno Bipolar, Ataques de Pánico, Ansiedad Generalizada entre otros padecimientos.

Tenemos que estar bien claros de que el deprimirse además de una enfermedad puede ser algo situacional y no debemos sentirnos abochornados por pedir ayuda. El sentirse ansioso o tener algún ataque de pánico puede ser algo ocasionado por las presiones del diario vivir.

El auto cuidado incluye no solo velar por nuestra salud física, cuidar nuestra salud mental es igual de importante.

Resulta sumamente extenuante vivir con dolor emocional, sentir que te “duele el alma”, es drenante sentir como te sudan las manos, se acelera el corazón, se hiperventila y no atreverse a decir sufro de ataques de pánico.

La mentalidad de cada uno de nosotros debe cambiar, debemos buscar ayuda si te sientes:

-Triste la mayor parte del tiempo
-Lloroso
-Baja autoestima
-Ansioso
-Irritable
-Sin ganas de hacer nada
-Sin razón para vivir

La mentalidad de la comunidad en general debe cambiar, no son locos, no son desajustados o les “falta un tornillo”, son personas que atraviesan una enfermedad que no tiene rostro, puede estar en cualquiera.

Este mes donde se crea conciencia de la salud mental, haz un cambio, busca ayuda, haz un cambio no estigmatices. El decirle a alguien “pon de tu parte “no es suficiente. El apoyo y la dirección a los centros de cuidado son vitales para que ese amigo o familiar del primer paso.

“Tengo una pregunta que a veces me tortura: estoy loco yo o los locos son los demás “-Albert Einstein