Pasado los debates, caminatas, propuestas, anuncios y festejos, llegó el momento de las elecciones y el escrutinio de estas. Para todos ha sido un proceso interminable ya que aun aparecen maletines, hay dudas de quienes ganaron y quienes no, reina la desconfianza en el proceso entre otras cosas.

Viviendo Puerto Rico y el mundo una inesperada y trágica pandemia, crisis económica, desilusión por algunos de sus líderes y necesidad de cambios, es normal que los ciudadanos asuman posturas hacia lo que entienden es la mejor opción.

Algunos se involucraron mucho en la campaña, otros, aunque más distantes, se identifican con su líder, con su familia y con sus seguidores. Cuando se elige una posición política en muchas ocasiones la persona se compromete emocionalmente de manera significativa. Se sienten ofendidos si se habla mal de su líder, lo apoyan y los ven hasta cierto punto como parte de su familia.

¿Qué pasa cuando los resultados no son lo que la persona espera?

En 2004 luego de que Bush derrotara a Kerry; Gordon, un psicólogo estadounidense, acuñó el término Síndrome de Stress Post Traumático Post Electoral (no es un diagnóstico psiquiátrico). El término es utilizado dado la similitud de algunos de los sentimientos experimentados a los del Trastorno de Stress Post Traumático.

Luego de una derrota electoral el elector puede sentir:

-Indignación

-Coraje

-Desánimo ante la vida

-Preocupación excesiva por el futuro

-Desconfianza en los resultados

Sentimientos asociados al proceso de luto, entre los que se encuentran:

Negación- “Esto es una pesadilla”, “Quizás se robaron las elecciones”, “No puede ser verdad”.

Ira- Coraje por la pérdida y con la sociedad. Coraje con los contrarios al verlos celebrar.

Negociación- “No voy a dañarme la mente”. " El pueblo tiene lo que se merece". “Quizás fue lo mejor, solo estarán cuatro años”.

Depresión- profunda tristeza por la perdida.

Aceptación-Aquí se da la tranquilidad ya que se acepta que no hay más que hacer.

Entre la población más vulnerable a estos sentimientos, se encuentran funcionarios públicos. Las personas que pasaron largas horas de trabajo en pro de las campañas políticas a su vez se encuentran más propensos ya que podrían perder su empleo con el cambio de gobierno.

Todos estos sentimientos asociados a la perdida son esperados, pero a diferencia de otras perdidas como las que son por fallecimiento son de corta duración.

¿Qué debe hacer si se encuentra experimentando luto post electoral?

No se sienta mal por ello, es normal sentirse de esa manera.

Continúe con lo cotidiano, su trabajo, hijos, diversión alejándose del tema político, de los mapas de colores y de hablar del tema.

Si entiende que se le hace difícil superar este proceso busque ayuda profesional. Reconocer cuando se está deprimido, ansioso es el primer paso.

Cada ciudadano tiene algo que aportar para Puerto Rico.

Dejemos las riñas partidarias atrás y seamos entes de ayuda para lograr un Puerto Rico mejor.

Si desea coordinar una cita con la Dra. Ingrid Marín Espiet, en su oficina localizada en el área metropolitana puede comunicarse al (787)222-4999.