Muchas veces nos preguntamos si aquello que hacemos como trabajo es lo que verdaderamente debemos estar haciendo. Creo que todos en algún momento de nuestras vidas nos hemos preguntado: “¿Este trabajo me llena? ¿Este trabajo es lo que vine a hacer al mundo?” Hay veces que contestamos la pregunta, nos calmamos y con el tiempo resurge. Esto es normal y muchas veces cíclico. A medida que vamos caminando en nuestra caminar ocurren cambios tanto internos como en el ambiente familiar, laboral y socioeconómico que nos llevan a preguntarnos esto una y otra vez.

Veo el cuestionamiento profesional como una forma en la que nuestro espíritu nos mantiene activos en el camino de búsqueda de la felicidad y el bienestar. La vida profesional nos ayuda a conectar con nuestro sentido de utilidad. Sentirnos útiles nos llena de vitalidad, esperanza y motivación, en fin, nos conecta con la vida misma.

Por esto, podemos decir que, si estamos miserables en el trabajo por la razón que sea, ello se ve reflejado en todos los aspectos de nuestra vida. También, puede pasar que el cómo nos sentimos en torno a nuestra vida profesional muchas veces tiene que ver con cómo nos sentimos con nuestra vida en general. El asunto se complica porque podemos cuestionarnos ¿qué vino primero si es la desilusión con el trabajo o con la vida?

Indiferentemente de qué vino primero si es la dificultad en el trabajo o la insatisfacción con la vida misma. Lo que queremos es lograr sentirnos mejor. Sobretodo, gozar de definición personal. Los errores son parte del proceso de crecimiento. El sentimiento de estar perdidos es, también, parte del proceso de encontrar esa autodefinición.

Una forma de llegar a nuestro centro cuando nos sentimos perdidos es conectar con la energía de nuestro signo astrológico. Si respetamos la naturaleza de nuestro signo astrológico ello nos asegura bienestar. Es desde el bienestar que podemos encaminarnos profesionalmente. Además de encaminarnos logramos definir con precisión nuestra vida profesional.

A continuación mis recomendaciones para cada signo en torno a qué se debe tener como meta a nivel del sentimiento para lograr encaminarnos profesionalmente. Memoriza tu lema y procura que todos los días estés viviendo desde él. Recuerda que todo cambia cuando haces cambios internos y tomas riendas sobre tu bienestar.

Aries (21 marzo-20 abril): La libertad suficiente para sentirte autosuficiente en términos de tus intereses y para auto gestionarte.

Tauro (21 abril- 20 mayo): Sentirte productivo sobre todas las cosas. La clave es tener todo para hacer y completar.

Géminis (22 mayo- 21 junio): Entablar contacto social. Estar en constante intercambio de ideas, recursos y aprendizaje con grupos de personas.

Cáncer (22 junio- 23 julio): Estar lo suficientemente cómodo para ser leal con las personas. Sentir que puedes ayudar los otros sin tener que estar a la defensiva.

Leo (24 julio-22 agosto): Desarrollar el liderato en comunidad y aportar en esa comunidad todo el empeño y pasión

Virgo (23 agosto-21 septiembre): Sentir que puedes dar lo mejor de ti y que eso tiene una recompensa. Eso es suficiente. Es importante que te permitas ver y gozar de los logros para que no se te escapen cuando llegan.

Libra (22 septiembre- 22 octubre): Aportar al concepto de belleza de todos. Ser un agente de armonía y balance para el mundo.

Escorpión (23 octubre- 21 noviembre): Una constante aventura que genere resultados concretos y ganancia económica

Sagitario (22 noviembre- 20 diciembre): Contribuir al desarrollo del bien común incluyendo que lo que se hace genere justicia social. Es importante sentirse creativo y fuera de un sistema de reglas sin sentido.

Capricornio (21 diciembre- 19 enero): El sentir que el esfuerzo personal devela los resultados justos y deseados, además de los

Acuario (20 enero- 19 febrero): El aportar algo innovador a la humanidad. Sentir que obtener todo el conocimiento posible vale la pena para algo verdaderamente importante.