Siempre que te lo propongas puedes estar muy en sintonía a percibir señales. A veces son los números repetidos y otras las mariposas. Lo que debes tener como meta es tener la capacidad de identificarlas como señales y a hacerles caso es casi un deber. Las señales vienen para todos por igual. Si aprendemos nosotros a entenderlas podemos educar a nuestras familias a hacer lo mismo.

Usualmente, los sueños y las señales del Universo son nuestro mejor método de comunicación con lo sutil. ¿Cuántas veces soñamos y lo que dicen los sueños es precisamente lo que necesitamos saber de nuestra vida en ese momento? A algunas personas esto les ocurre mucho y a otras pocas. Lo importante es que, cuando ocurre, hay que aprovecharlo.

Aunque la interpretación de sueños se ha vuelto algo muy popular y comercial, ningún libro o website en el mercado puede ofrecer una interpretación de sueños tan acertada como la propia persona que sueña. ¿Por qué? Porque el inconsciente y el mundo de los sueños son muy individuales; solo le pertenecen al soñador.

La mañana siguiente al sueño es de suma importancia puesto a que es aquí cuando más contacto, recuerdos y experiencias del sueño se pueden traer al consciente. Es importante no aplazar la interpretación para otro momento puesto a que en otro momento pudiese ser muy tarde.

10 pasos para llegar a la interpretación de tus sueños:

1. Si te levantas en la madrugada por algún sueño, anótalo porque en la mañana no lo recordarás.

2. Antes de levantarte de la cama, trata de traer a tu cuerpo todo tipo de sensaciones y/o emociones.

3. Luego, une imágenes del sueño con las sensaciones y emociones que estás experimentando.

4. Identifica cuáles de estas sobresalen más que otras.

5. Comienza a asociar las imágenes y las sensaciones con aspectos, situaciones y personas de tu vida presente.

6. Identifica el tema principal de estas imágenes (si es pelea, amor, miedo, abundancia, etc.).

7. ¿Cuál de todas estas imágenes te representa a ti?

8. Siendo tú esa imagen, ¿qué mensaje le quisieras dar a la persona que te mira o escucha?

9. ¿Qué otras ideas, temas, emociones o sensaciones te llegan?

10. Ata cabos y haz una historia de las partes desglosadas arriba y tendrás la interpretación de tu sueño.

Es importante contestar todas estas preguntas con lo primero que te venga a la mente. Es decir, sin pensarlo mucho. La interpretación debe ser más instintiva que otra cosa. Si algún sueño en particular nos da mucha dificultad para interpretar, es mejor ponerlo a un lado, escribirlo y retomarlo en otro momento. Quizás en el momento menos pensado nos viene luz sobre el mismo. La magia de todo esto es no forzar la mente a llegar a un resultado o interpretación.

Con práctica, dedicación y apertura todos podemos volvernos interpretadores de sueños. Sobre todo, hay que desarrollar confianza en nuestra interpretación y, cuando llegamos a una, mantenerla. Si dejamos que la duda y la mente lógica intente hacer sentido de lo interpretado, entonces, perderemos la esencia del sueño y su mensaje.