Luego de muchos años de espera –al menos por este servidor- el primer largometraje del cineasta estadounidense, Terrence Malick, recibe un más que digno lanzamiento que completa su pequeña pero monumentalmente valiosa filmografía en formato Blu-ray.

Por otro lado, uno de las mayores clásicos del cine inglés, The Life and Death of Colonel Blimp, recibe un más que merecido “upgrade” más de una década después de su inclusión en The Criterion Collection.


Badlands

Después de Bonnie and Clyde, pero antes que Mickey y Mallory, estaban Kit y Holly, la pareja protagónica Badlands (1973), del director Terrence Malick, quien se inspiró en un notorio caso verídico para dar sus primeros pasos en el séptimo arte. El valor de su ópera prima no vendría a ser verdaderamente elevado sino hasta varios más tarde, en ese periodo de dos décadas en el que se distanció de la pantalla grande tras haber completado dos excelentísimos trabajos, siendo el otro Days of Heaven (1978), cuando la gente se preguntaba qué había sido de aquel cineasta tan prometedor.  

Visto ahora, cuarenta años tras su estreno, es evidente que Badlands posee todas las idiosincrasias de este gran maestro del cine: las narraciones de sus protagonistas, la contemplativa mirada al mundo que los rodea, la gloriosa selección musical, la impecable cinematografía y, sobre todo, la manera cómo sus personajes reflexionan en torno a sus acciones.

Martin Sheen interpreta a Kit, un hombre de veintitantos años, solitario y sin rumbo, que un día, mientras recogía basura, conoce a Holly (Sissy Spaceck), una adolescente que inmediatamente queda cautivada por este chico con aires de James Dean. Siendo diez años mayor que ella, el padre de Holly –encarnado por Warren Oates- se opone a la relación, por lo que Kit rápidamente se deshace de él del mismo modo que se deshace de todo lo que se interpone en su camino y no sigue sus instrucciones.

Kit es un personaje que vive de ser el punto de atención, de ser idolatrado, y en Holly encuentra una fiel e ingenua devota que lo sigue a través de las planicies de Dakota del Sur cometiendo una serie de crímenes que elevan su nivel de notoriedad. Malick nos ofrece una ventana a los pensamientos de Holly mediante la típica narración que acompaña todos sus filmes, escuchando lo que parecen ser pasajes del diario de la adolescente quien expresa con candidez las fechorías que cometen y los ilusorios planes que tiene para un futuro junto al hombre de su vida.

De todas las películas de Terrence Malick, Badlands es la que contiene la narrativa más lineal, siguiendo los pasos de Kit y Holly desde su unión hasta su eventual separación. Aún no empezaba a experimentar con la estructura aunque sí se observa su capacidad para encontrar belleza dentro de los momentos más sombríos. Su estilo se iría refinando y perfeccionando con el paso de los años, pero aquí es todo un deleite poderlo apreciar en su estado embrionario.

Presentación audiovisual

Esta gloriosa transferencia en alta definición, restaurada en 4K, demuestra categóricamente que Malick siempre ha contado con un ojo ejemplar. Anteriormente sólo había visto Badlands en una copia, muy mala, en DVD, por lo que ver este nuevo Blu-ray, que reproduce la película en su formato original 1.85:1 en resolución 1080p, fue toda una revelación. Los close up poseen un altísimo nivel de detalle, mientras que los hermosos paisajes rurales de Estados Unidos lucen mejor que nunca, con un impecable contraste y saturación de colores. En una palabra: perfecta.

En términos de sonido, para ser una pista en LPCM 1.0, la misma manifiesta una gran dimensión y profundidad. Ya sea en las secuencias en el bosque o la persecución final, el sonido ambiental se escucha con la misma nitidez que el diálogo y el acompañamiento musical de George Aliceson.

Apaguen las luces, suban el volumen y déjense llevar por esta tremenda presentación.

Extras

Mucho más de lo que pudiese desear. Mentira. Podría desear una entrevista o pista de comentario con Malick, pero eso jamás iba a suceder.

Lo que sí tenemos es un excelente documental acerca de la filmación que cuenta con nuevas entrevistas a Sheen, Spaceck y el diseñador de producción, Jack Fisk, realizadas por Criterion con motivo de este lanzamiento. Son 42 minutos que se van en un abrir y cerrar de ojos.

El productor Edward Pressman también fue entrevistado por Criterion en un segmento aparte en el que habla sobre la complicada producción de Badlands. Mientras, el editor Billy Weber -quien también trabajó con Malick en Days of Heaven y The Thin Red Line- discute la estructura narrativa del filme en una tercera entrevista.

El disco incluye un episodio del programa American Justice que gira en torno a Charles Starkweather y Caril Ann Fugate, la pareja que en 1958 cometió una serie de asesinatos desde Nebraska hasta Wyoming y que sirvió de inspiración para los personajes de Kit y Holly.

Por último, tenemos el tráiler de Badlands y el panfleto ilustrado con un ensayo del cineasta Michael Almereyda.


The Life and Death of Colonel Blimp

Al envejecer tenemos dos opciones: avanzar con los nuevos los tiempos o quedarnos aferrados a los nuestros. Este dilema es el que atraviesa el general británico Clive Candy, protagonista de The Life and Death of Colonel Blimp (1943), a lo largo de los cuarenta años que se resumen en poco menos de tres fascinantes horas. El dúo de directores y guionistas compuesto por Michael Powell y Emeric Pressburger se encarga de que una de sus mayores obras se sienta como si hubiésemos vivido toda una vida junto a su personaje principal.

La película se sostiene de la grandiosa actuación de Roger Livesey como Clive Candy. Cuando lo vemos por primera vez, durante un simulacro de guerra en 1942, es un viejo regordete y refunfuñón que es confrontado por sus “enemigos” en un baño turco. Su molestia al ser interrumpido es evidente y le cae encima al joven soldado, cayendo en una pequeña piscina que sirve de vehículo para llevarnos flotando a través del tiempo 40 años al pasado. No sería hasta el final de la cinta que caería en cuenta que el viejo actor del principio es el propio Livesey luciendo un impresionante maquillaje para la época.

En 1902, Candy es un coronel lidiando con los ánimos que apenas están comenzando a caldearse entre Inglaterra y Alemania. Durante un viaje a Berlín, en el que insulta a un grupo de soldados alemanes, es sometido a un duelo de espadas con Theo Kretschmar-Schuldorff (Anton Walbrook), quien paradójicamente se convierte en su mejor amigo, aunque ambos quedarían en lados opuestos de las trincheras durante la Primera Guerra Mundial.

Cuenta la historia que el primer ministro Winston Churchill quiso prohibir el estreno del filme, y al verlo no es difícil ver por qué. Aun cuando no se trate de los nazis, el guión de Powell y Pressburger le da una cara al enemigo, lo hace humano a través de la compasiva interpretación de Walbrook. La amistad entre Candy y Theo los lleva a meditar acerca de la vida y la guerra en los varios encuentros que tienen a través de los años. Las verdades que dicen y la caballerosidad entre ambos no era lo que el imperio británico quería que se difundiera de cara a la guerra contra Hitler.

La dirección de Powell y Pressburger es excepcional, estéticamente hermosa y con un preciso manejo del tiempo narrativo, obviando eventos importantes en las vidas de los personajes para exponer simplemente las consecuencias de estos, cuando ya ha pasado suficiente tiempo como para realizar un sano juicio desprendido de las emociones. Redondea el grandioso trabajo del elenco la maravillosa Deborah Kerr en tres papeles distintos en los que logra equitativamente demostrar su vasto talento histriónico.

Presentación audiovisual

La magnífica cinematografía en Technicolor resalta de la pantalla gracias a la extraordinaria restauración en 4K que recientemente se le realizó al filme, presentado en su formato original 1.37:1 en resolución 1080p. El nivel de detalle es tan excepcional como los vibrantes colores, sólidamente saturados. La copia no sufre de problemas de contraste, brillo, deterioro… nada. Se ve inmaculada.

El disco contiene una pista de audio, en inglés LPCM 1.0, que se escucha perfectamente bien. Limpia, nítida y con un buen balance entre las voces, el sonido ambiente y la música.

Extras

El inigualable Martin Scorsese ofrece una introducción al filme, de 14 minutos de duración, que fue grabada exclusivamente para este Blu-ray.

Un feature que ya no es muy común en los lanzamientos de Criterion pero que siempre me ha gustado son las demostraciones de restauración, que aquí hacen su regreso en un breve segmento de 5 minutos en el que Scorsese aborda la restauración en 4K de The Life and Death of Colonel Blimp. Las comparaciones entre el antes y después son asombrosas. Incluyo el vídeo más abajo.

Scorsese también comparte una pista de comentario con el difunto Michael Powell que fue incluida en el lanzamiento original de la cinta en DVD en 1998.

En el segmento A Profile of “The Life and Death of Colonel Blimp”, de 24 minutos de duración, se entrevista Kevin Macdonald, nieto y biógrafo de Emeric Pressburger, el actor y guionista Stephen Fry, el historiador Ian Christie y el cinematógrafo Jack Cardiff.

La editor Thelma Schoonmaker, fiel colaboradora de Scorsese y viuda de Michael Powell, discute en Optimism and Sheer Will el legado de su difunto esposo, la restauración de la película y la importancia de ésta junto al autor Michael Henry Wilson.

David Low’s Colonel Blimp es una galería de imágenes de las caricaturas de Colonel Blimp creadas por el artista David Low, en las que Powell y Pressburger se basaron superficialmente para el largometraje.

El panfleto ilustrado contiene un ensayo escrito por la escritora de cine Molly Haskell.


Nota final

Añádanlos a sus wish lists en Amazon, pídanlos de regalo de cumpleaños o inclúyanlos en sus cartas a Santa Claus, pero estos dos Blu-ray TIENEN que formar parte de sus colecciones. Son dos excelentísimas películas, extraordinariamente restauradas en alta definición y acompañadas de valioso material suplementario. Sin duda acabarán siendo de los mejores lanzamientos de The Criterion Collection en el 2013.