Muchos se han asombrado, pero, por fin, se trabaja seriamente con el futuro de la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública. Tremendo paso y me alegro. El comité de trabajo nombrado por el gobernador Ricardo Rosselló -para transferir los derechos y propiedad de esta corporación a una entidad privada sin fines de lucro- está balanceado. Ellos tendrán que ponerle el cascabel al gato.

Los rumores de cambios y ventas vienen desde hace muchos años, pero llegó la hora de la verdad. Cuando Jorge Inserni era el presidente se hablaba de vender el canal. Un banquero quería montar un sistema de televisión en cada sucursal; se dice que pagaría de $40 a $35 millones por toda la propiedad, incluyendo el terreno en Hato Rey, que tiene una localización privilegiada, pero no pasó nada.

Ahora la Corporación no tiene el presupuesto de hace varios años cuando Inserni anunciaba con bombos y platillos las unidades móviles que compraba, con nombres de personajes de Disney, y fue criticado. Sin embargo, fue cuando más gente trabajaba en el canal, pero había dinero para hacer televisión. 

Actualmente no hay $40 millones, y si llegan a $15… ¡bingo! ¿Que las emisoras cumplen un fin público y educativo? Lo cierto es que sin dinero no cumplirán nada. 

Cuando Linda Hernández presidió la Corporación, también hubo más inclinación hacia la fase educativa, pero actualmente la televisión no es necesaria para educarse. El canal 40 de la Universidad Ana G. Méndez era educativo, pero el huracán María lo cerró. El personal se quedó sin empleo y se reinventaron. Y su presupuesto era menor que el de WIPR TV. 

Cuando muchos medios radiales y televisivos salieron del aire por el huracán María, el personal de WIPR trabajó fuerte, vimos a David Reyes, Felipe Gómez y Ada Monzón, entre otros, horas y horas al aire. Pero los meteorólogos dicen que ese tipo de huracán es cada 100 años, así que para el próximo no estaremos por aquí.

La Junta y la Sra. Natalie Jaresko sentenciaron que hay que recortar y pregunto, ¿cuántos estados o países tienen canales de radio y televisión pagados por el gobierno? 

Ahora que el agua quiere llegar al cuello es el momento de buscar alternativas reales. ¡Ah! Y conseguir millones en anuncios no es real.

Hace poco escuché a una actriz molesta porque no tenía trabajo en el taller dramático del canal. Cuando Charlie Rodríguez era presidente del Senado creó el taller dramático pagado con fondos públicos. Pero algunos actores entienden que es una obligación darles trabajo. ¿Y cuando tratan de buscar nuevos talentos? Vimos la que se le armó al Dr. Rafael Batista y del tiro se fue. 

Esta semana escuché a un actor hablando como si fuera una obligación del gobierno sacar dinero para pagarles. Mi’jo despierta, eso se acaba. Cuando cerraron el departamento de Noticias de Univision y botaron a más de 120 empleados que tuvimos que reinventarnos. 

No podemos alegrarnos de despidos y el Gobernador ha dicho que no los habrá, pero o aparece un novio pronto para la Corporación o la tijerita ucraniana llegará haciendo pespuntes y trutrú. 

Vamos a remar para el mismo lado, sugerirle ideas reales, no quimeras o emocionales al comité del Gobernador. Que se decida lo mejor y que la Comisión Federal de Comunicaciones lo apruebe. Ese trámite podría tardar más de seis meses en la FCC. Así que ya hay tiempo para comenzar a prepararse, como en los huracanes, antes que lleguen los vientos. Hello, gracias.