Si en Puerto Rico somos “fan freak” de los concursos de belleza, en Venezuela ni se diga. Sin embargo, la pandemia, la situación económica del país y las restricciones impuestas por Venevisión -que tiene la franquicia del certamen-, hicieron que este año utilizaran un estudio de televisión sin público y fue distinto aunque era en vivo. La ganadora, Amanda Dudamel, representará a Venezuela en el Miss Universe en Israel, en diciembre.

Nada de grandes estadios como el Poliedro de Caracas que acomoda 20,000 personas y se llenaba. Este año fue un estudio de televisión con muchas luces en distintos colores para darle grandiosidad. Los aplausos eran grabados y se notaban.

Cambiaron tanto el certamen de Miss Venezuela, que ni tan siquiera dieron las medidas de las chicas y eso lo criticaron. Amanda participa en la Fundación un par por un sueño, en la cual le consiguen zapatos a niños pobres. Con un buen vídeo documentaron su trabajo. Estudió diseño de modas en Italia, habla inglés, español e italiano.

La utilización de videollamadas con familiares fue la modalidad. Pero muchos criticaron que cuando ganó Amanda, su padre, quien es entrenador de equipos de fútbol, apareció rápido en una videoconferencia desde Colombia donde trabaja, y su hermana y su mamá desde Chile. De hecho, ellos no se veían ni asombrados por el triunfo. Umm muy buen sistema de comunicación.

Muchos alegan que fue demasiado rápido lo de la videoconferencia y sugieren que podría estar arreglado el triunfo de Amanda. Pero ella, desde el principio, se proyectaba como ganadora y se expresaba muy bien. Como siempre algunas de las que pierden se molestan. Hello, gracias.

Marjorie: de villana a cobradora

Marjorie de Sousa participó en la telenovela “La desalmada” protagonizada por Livia Brito y José Ron. Las villanas son su plato fuerte. Posiblemente, algunas personas no saben distinguir entre su vida privada y sus actuaciones.

En la telenovela, sus escenas junto a Eduardo Santamarina le quedaron divinas. El último pleplé entre ella y su ex, Julián Gil, es que supuestamente él no le paga la pensión y la deuda supera los $14 mil dólares.

Pero Marjorie ha dicho por qué no hay tanto lío público. Ahora se encarga de todos los gastos del niño y mientras graba no tiene tiempo de estar en los juzgados.

Así que ahora, al concluir la telenovela, tendrá tiempo para volver al pleplé y cobrar lo que le deben, si es cierto lo de la deuda. Así que no dude que antes que llegue Santa Claus Julián tenga que sacar un “bonito de Navidad” para pagar lo que debe; digo, si es que lo debe.

Y hablando de la telenovela, la cayeyana Laura Carmine se contagió con COVID-19 mientras grababa. Aunque se había vacunado, la pusieron en cuarentena en su casa. Menos mal que salió bien y pudo continuar con su personaje. Ahora se dice que viene una segunda parte de “La desalmada”. Ya veremos si es tan buena como dicen.