Mientras las telenovelas nos vendían a William Levy como el supergalán divino, que salió de Cuba y tiene los ojos pícaros, la realidad con su compañera Elizabeth Gutiérrez era otra cosa. Ambos salieron del reality show “Protagonistas de telenovelas” y la vida los llevó a estar juntos muchos años sin casarse.

Luego de haberlo visto con más de dos o tres chicas, especialmente sus protagonistas en varias producciones, por fin Elizabeth abrió los ojos y ha dicho su versión... y él también.

En campo y pueblo, muchas féminas se desviven por sus telenovelas y aunque no es el mejor actor del mundo, pues pasaba y tuvo éxito. Curiosamente, sus últimas telenovelas no han sido un éxito, ni una sombra de lo que fueron “Cuidado con el ángel”, con Maite Perroni, o “Sortilegio” con Jacqueline Bracamontes. Ni tan siquiera teniendo a la colombiana Carmen Villalobos como villana pego “Café con aroma de mujer”.

Cuando en Miami lanzaron el ron que promocionaba fue un superbótate y los ejecutivos anunciaron que sería el licor del momento. Hasta ahora nos hemos enterado que fue otro fracaso perder el dinero los que invirtieron con dicho proyecto. O sea, que nada de lo que dijo la propaganda era cierto.

Así que poco a poco hemos visto la subida y bajada de William. Lo que sí es muy lamentable son las llamadas a la Policía para que intervinieran con situaciones entre Elizabeth y él, pero luego veíamos en las redes las fotos de toda la familia de vacaciones en Europa.

Pienso que muy hábilmente él no podía tener un escándalo público. No sería el primero ni el último que pierde empleo por líos con sus parejas y más si había intervención de la Policía. Fernando del Rincón síndrome. ¡Sabrá Dios cómo han aguantado!

Mucha gente ha muerto por situaciones como esta. Quizás la vemos de lejos, pero sabrá Dios si tenemos a alguien cerca de nosotros que esté en las mismas.

Lo que nunca entendí es que Elizabeth nunca dijo nada y todo era “peaches and cream”; los que los taparon hicieron buen trabajo. No puedo. La autoestima de ella parece que no está bien y aguantó hasta más no poder.

Así es la vida de muchas de las que cada semana vemos víctima de violencia.

Muy lamentable también la situación entre ellos y el que los hijos hayan sido protagonistas de estas situaciones. En otras palabras, William Levy está viviendo su propia telenovela, donde por lo que vemos puede ser desde villano hasta galán. Usted escoja lo que más le guste.

La llegada de Pablito

Si querían líos y problemas en “La casa de los famosos”, la producción ha seleccionado a uno de mis amigos queridos, Pablo Montero, cuyo segundo apellido puede ser problemático. El cantante y actor, que le encanta comer y beber pero a la hora de pagar tiene un caimán en el bolsillo, entró a la casa. Pablo es famoso por eso y hasta le han llamado a la Policía, pues no paga con el viejo truco de irse al baño y desaparecer al momento de la cuenta.

En Acapulco se fue de un restaurante sin pagar, en el Distrito Federal lo mismo y más reciente en Cancún.

Así que su consigna es fácil: entró a la casa de los famosos posiblemente a buscar dinero. Por lo menos para pagar las cuentas.

Lo increíble es que entró preguntando por Maripily. Sí, por Maripily. Creo que pudieron haberse conocido en una fiesta, en el Festival de la Bahía... pero lo que sí sé es que no dejará quieta a la boricua.

La actriz Geraldine Bazán es nice, pero es como una lámpara: no compone nada en la casa y si la sacan, who cares? Y si ponen a Pablo a dar serenatas, Lupillo se molestará pues definitivamente Montero canta más que él y sería una humillación. Hello, gracias.