Meditación: En las buenas y en las malas
La realidad que vivimos nos está apretando los botones, de ésta aprendemos a ser mejores, o estamos fritos.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 5 años.
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Ya entrada la mañana luego del cafecito bien aguado que tomo creyéndome que es café puya, me acomodé para meditar aunque fuera por cinco minutos con el fin de ser consistente a la meta trazada: meditar sin falta todos los días.
Esta vez, no sé si por la limitada cafeína consumida o por haber bajado la guardia, comencé a sentir una energía que generó gran inquietud. ¿Qué me pasa? Y con honestidad pensé en varias razones, algunas muy lógicas, ¡claro! El mundo entero está viviendo una gran crisis, hay incertidumbre y ansiedad por todas las esquinas. También, porque la realidad que vivimos nos está apretando los botones, de ésta aprendemos a ser mejores, o estamos fritos.
Decidida me quedé respirando, confiada en que me iría sintiendo mejor. Entonces recordé, previo a la pandemia mis ratos para la meditación se habían reducido o tal vez le había perdido su propósito o esencia. Se habían convertido en otra actividad automática, como lavarme los dientes o servirme el café que realmente parece un té de tanta agua que le echo.
¿Por qué en automático? Recientemente se han multiplicado los vídeos, clases, blogs, e información sobre la antiquísima práctica de la meditación. Esto evidencia que nosotros los humanos buscamos reforzar nuestro bienestar especialmente cuando atravesamos una crisis o no nos sentimos bien. Pero, ¿qué pasa cuando sentimos, o nos creemos que todo sí anda bien?
Usualmente nos separamos de los hábitos que precisamente nos llevaron a sentirnos mejor. Y es desde ahí que se crea un círculo vicioso y que solo nosotros podemos romper, practicando las herramientas como costumbre y desde su esencia, en las buenas y en las malas.
Entre los obstáculos que buscamos, y a veces encontramos, para no practicar la meditación está la idea de que es fundamental tomar clases, que hay que sacar tiempo que supuestamente no tenemos o que se trata de una práctica esotérica que asusta o se aleja de creencias religiosas.
Todas, falsas premisas que lo que logran es adornar y hacer más fuerte nuestro ego de separación. Meditar es una práctica sencilla que cuando la hacemos hábito genuinamente logramos ver resultados positivos en nuestra salud, ánimo y vida. Solo hace falta voluntad y deseo de sentirnos mejor y mejor, alineados a nuestra mejor versión y a la bondad del universo. Aquí en el enlace les comparto en amor un vídeo para que en sus casas lo intenten. ¡Adelante!
Meditación en tiempos de COVIDPara calmarnos, llenarnos de energía positiva, oxigenar el cuerpo y la mente, cuidar la salud. #lomejordetipr #lifecoach #coachdevida #maestrapsicologíapositiva
Posted by Lo Mejor de Ti con Táyna Rivera on Monday, March 23, 2020
¿Por qué meditar?
1. Fortalece el sistema inmunológico.
2. Disminuye la tensión arterial y física.
3. Disminuye el insomnio.
3. Brinda mayor claridad de pensamiento para responder adecuadamente a los conflictos. En el caso de la depresión funciona para prevenir crisis.
4. Estimula el cambio de las situaciones negativas a positivas.
5. Produce armonía.
6. Ayuda a la relajación mental.
Táyna Rivera Llavona es fundadora de Lo mejor de ti, lleva una década sirviendo a otros en su evolución personal y profesional; hacer transformaciones en sus vidas a través de la práctica seria del life coaching. Es Life Coach (CPC) (CRC) (CBEC), maestra en psicología positiva y maestra de yoga denominada Yoga Siromani en el 2004 en Sivananada Centre, Quebec. Ha llevado con éxito sus talleres y servicios corporativos a Costa Rica, Panamá, Estados Unidos y Puerto Rico. Es autora de las novelas de ficción "14 días de Marisol", "SIETE: Una historia para tu alma" y su más reciente publicación de autoayuda, "Hacia la Victoria". Ofrece talleres a empresas, grupos y servicios individuales en su oficina en Guaynabo y telefónicamente para clientes fuera de Puerto Rico.
Lo mejor de ti con Táyna
Columna de autoconocimiento y evolución personal.