¡Feliz año para todos! Nos graduamos, pasamos el 2020 y todas sus sorpresas. Ahora nos toca dejarlo atrás y quedarnos con todo lo aprendido.

Este nuevo año propone nuevas oportunidades, es clave mantenerse en gratitud y conocernos mejor para sacar nuestros dones, expresar nuestras características positivas y fortalezas. Una buena práctica para encontrar esa luz que cada uno posee (además de alimentar el espíritu) es evitando las comparaciones.

Una vez me dijeron: Quien se compara siempre encontrará alguien mejor que él y alguien peor. ¿Quién tiene la medida correcta? La realidad es que al compararnos con alguien fuera de nosotros solo trae una gran pérdida de energía y tiempo valioso. Al no compararnos también nos estamos liberando de mucha tristeza por creer no ser suficientes. Ser, sin comparación ni competencia, nos empuja a revisar, cómo podemos mejorar, qué tenemos que hacer para parecernos a la versión que queremos ser y ahí comienza un hermoso proceso que no termina nunca, conocernos y crecer.

Entonces empezamos a sentirnos cada vez más libres de ser quiénes somos y por eso dejar relucir nuestra luz. Seamos luz este 2021. Compartamos nuestro bien, a diario y con afán, no hay satisfacción mayor que dar a otros quienes somos. Este año que no nos detengan las noticias que no nos favorecen para dar y ser lo mejor de nosotros. Y si nos caemos, respiremos, vamos a sacudirnos y a continuar, como lo hemos hecho antes.

Al establecer tus metas, comenzar el año y crear sus oportunidades, recuerda, en agradecimiento compárate solo contigo mismo. ¡Adelante!