Durante el embarazo, la madre le transmite al feto proteínas encargadas de luchar contra las infecciones, comúnmente conocidas como anticuerpos. Estos proporcionan cierta protección frente a algunas enfermedades en los primeros meses de vida. Sin embargo, esta inmunidad disminuye gradualmente con el tiempo, dejando a los recién nacidos más vulnerables a las enfermedades. Así lo explicó el doctor Gerardo Tosca, pediatra y presidente de la Sociedad Puertorriqueña de Pediatría.

Entre las afecciones con mayor riesgo de incidencia en los niños menores de cinco años, se encuentra la enfermedad neumocócica invasiva (ENI).

Esta patología está causada por la bacteria streptococcus pneumoniae, que también se conoce como neumococo, explicó el pediatra. La infección por neumococo puede producir distintas enfermedades que se clasifican en invasivas y no invasivas.

“A diferencia de la enfermedad no invasiva, la ENI tiende a ser más grave debido a que se produce dentro de algunos órganos y en la sangre”, expuso Tosca. La otitis es un ejemplo de la clasificación no invasiva “porque es específica en el oído y no pasa por el torrente sanguíneo”.

En cambio, la ENI puede provocar infecciones severas como meningitis, que es la inflamación de las membranas (meninges) que rodean el cerebro y la médula espinal. Además, puede causar bacteriemia ―que es la presencia de bacterias en la sangre― y pulmonía bacteriana, que es una inflamación de ambos pulmones por el neumococo que corre en la sangre.

El especialista agregó que, según la infección que se presente, los niños ―que son la población de mayor riesgo al igual que los adultos de más de 65 años―manifiestan síntomas, tales como: fiebre, tos, incrementación de las células blancas, deshidratación, no comen correctamente o entran en estado shock.

La ENI se puede transmitir por el aire al toser o estornudar, añadió Tosca.

Fortalezca el sistema inmunitario de su bebé

Actualmente, la mejor estrategia para prevenir el contagio es la vacunación, de acuerdo con el pediatra. Este indicó que se estima que hasta 1.6 millones de personas mueren cada año como resultado de la ENI y cerca de esa mitad son menores de cinco años de edad. “Por eso es la importancia de poder prevenirlas mediante la vacunación”, sostuvo.

La vacuna está indicada para menores de dos años. Se recomienda que se administre en los bebés comenzando a los dos meses. “Con la vacuna, tú creas anticuerpos que pueden facilitar que el cuerpo combata esta bacteria”, comentó el pediatra.

De acuerdo con Tosca, la primera dosis se recomienda a los dos meses de nacido debido a que es a partir de ese momento que comienzan a disminuir los anticuerpos que el niño recibió de la madre. Ante esto, el bebé debe crear sus propios anticuerpos. “Es por eso la racionalidad de comenzar las vacunas en serie y que el adyuvante se haga al tiempo correcto para que puedan llegar a la protección requerida y necesaria”, enfatizó el especialista.

El niño debe recibir cuatro dosis de esta vacuna en los siguientes periodos: a los dos, cuatro, seis y 15 meses de edad. También está recomendada en niños con el sistema inmune debilitado, enfermedades cardíacas y asma.

“Es una de las vacunas importantes en las series primarias de los niños y salen todos los años en el esquema de vacunación, que es requisito y mandatorio ahora mismo para entrar a las guarderías y a las escuelas”, señaló el doctor.

Las visitas regulares al pediatra son indispensables

Si tiene dudas sobre el proceso de vacunación, las visitas frecuentes al pediatra, además de ayudar a los padres a manejar los trastornos comunes en la niñez, también sirven para explicar la importancia de la inoculación.

“Se supone que, durante el primer año de vida, las visitas al pediatra sean cada dos a tres meses, específicamente a los dos, cuatro, seis, nueve y 12 [meses de vida]. Luego, hasta los dos años, son cada tres meses”, dijo Tosca.

Además de la vacunación, el pediatra enfatizó que durante las visitas de rutina también se evalúa el peso, estatura, la nutrición, el bienestar cognitivo y el desarrollo del sistema motor.

Para más información, visite a un profesional de la salud que le oriente en torno a la vacunación contra la ENI.