En el patio interior de La Concha Resort en Condado, justo frente a la piscina, ubica el restaurante Solera, que complace el gusto de turistas y locales con su oferta de tapas y hamburguesas.

Su propuesta culinaria se trata de un renovado menú destinado a quienes disfrutan de la playa, la piscina o los que prefieren la comodidad de la recepción de la hospedería. Como agasajo, todos los lunes, martes y miércoles, el restaurante otorga un 20% de descuento a los clientes que pagan con la tarjeta Visa (descubre más restaurantes en visa.com/sal).

El sous chef de Solera, Emanuel Oliveras, explicó que el concepto trata de que, en un ambiente relajado y con el servicio de primera que ofrece La Concha Resort, los comensales diseñen su propia hamburguesa. Pueden escoger entre cuatro proteínas, ocho quesos y 10 toppings que se sirven entre un rico pan brioche.

Hay opción de carne Angus, regular y una mezcla a la que llaman brisket blend. Pero también hay selección de pollo, tuna steak y hamburguesa vegetariana. Los famosos sliders se hacen con longaniza de Puerto Rico y las quesadillas se combinan con una salsa criolla de la casa.

“Usamos ingredientes locales y le damos el toque criollo y caribeño”, destacó Oliveras, quien trabaja junto con la experimentada chef ejecutiva, Erika Gómez.

Gastronomía que parea con una actitud relajada

Solera cuenta con dos barras —una está junto al restaurante y otra en la recepción del hotel— donde frecuentan las peticiones de mojitos de melón, de jalapeño y el tradicional, con sirops hechos a mano.

En la noche, la barra de la recepción ofrece opciones para picar, como fish and chips, costillas, croquetas de bacalao y de pulpo, y dumplings.

Solera también ofrece paquetes de cenas románticas en la playa, para los que se diseñan menús por temporada. Para los grupos que prefieran mantenerse en la recepción, existe la alternativa de pedir un paquete especial con anticipación que complazca todos los gustos. Oliveras adelantó que están trabajando con el menú de primavera, siempre usando ingredientes locales y preparando los platos con elegancia.

“El concepto ha tenido muy buena recepción. Es un menú variado en el que la gente siempre encuentra alternativas para comer, mientras disfrutan de un rato relax en el área de la piscina, la playa o el lobby”, aseguró Oliveras.