Por un lado, es desafortunado que unos ocho integrantes de los Vaqueros de Bayamón en el Baloncesto Superior Nacional (BSN) hayan arrojado positivo a la prueba de coronavirus, retrasando su entrada a la burbuja en la que se celebrará desde el 10 de noviembre la continuación del torneo en un hotel de Río Grande.

Pero por el otro, el que se hayan detectado los casos antes de ingresar a la burbuja, donde habrían podido provocar un brote y la paralización de un evento en el que se ha invertido tiempo y dinero, habla bien de los protocolos que se siguieron, específicamente el de la ‘pre-burbuja’ que realizaron los equipos.

Así lo ve el reconocido médico de la Selección Nacional de Baloncesto y de los Vaqueros, el Dr. Luis Molinary, quien recordó que la ‘pre-burbuja’ se estableció por dos motivos: para poder aislar y tratar a los posibles casos positivos antes de ir a Río Grande, y para que los jugadores se fuesen acostumbrando a vivir aislados, lejos de su familia y amigos.

“El grupo asesor médico, principalmente el Dr. William Félix, quien nos habló del concepto, fue quienes hablaron de la idea de acuartelar a los jugadores en un hotel e ir a practicar todos juntos”, relató Molinary. “Porque así, si alguno salía positivo, que podía pasar porque (los jugadores) venían de sus casas, pues que nos diera tiempo de que pasaran lo que nos dice el CDC (Centers For Disease Control and Prevention) que son los 10 días de estar positivo y ser infeccioso”.

Aunque no se han revelado los nombres de los contagiados de los Vaqueros, el Dr. Luis Molinary dijo que todos deberán estar libre del virus y a tiempo para comenzar a jugar en la 'burbuja' el 13 de noviembre.
Aunque no se han revelado los nombres de los contagiados de los Vaqueros, el Dr. Luis Molinary dijo que todos deberán estar libre del virus y a tiempo para comenzar a jugar en la 'burbuja' el 13 de noviembre. (ANDRE KANG)

Molinary relató que cada uno de los 10 equipos cuenta con un médico y que el BSN cuenta con otro grupo médico de más de cinco galenos adicionales. Pero es el médico de la organización el responsable de los casos que puedan surgir en una franquicia.

Una de las teorías es que hubo jugadores que no fueron a las prácticas pero fueron a visitar al hotel a jugadores que estaban practicando y tuvieron contacto con alguno de los que estaba allí. Ese jugador ese día no fue a la práctica, pero tras visitar al que estaba aislado, al otro día fue a la práctica y llevó el virus. Así que según salían los positivos los fuimos aislando, pero ahí fue que levantamos bandera y le dijimos que no podían compartir en el hotel porque se iban a contagiar y llevar el virus a la práctica

-Dr. Luis Molinary

“En Bayamón, el primer y segundo positivo se aislaron tan pronto hubo resultados positivos. Yo personalmente me encargué de que esos jugadores no volvieran a una práctica. Y no lo hicieron. Los otros cinco lo que pensamos es que pudieron haber pasado dos cosas, aunque eso se lo dejamos al epidemiólogo, que es el que está trabajando con el ‘contact tracing’”, contó.

“Una de las teorías es que hubo jugadores que no fueron a las prácticas pero fueron a visitar al hotel a jugadores que estaban practicando y tuvieron contacto con alguno de los que estaba allí. Ese jugador ese día no fue a la práctica, pero tras visitar al que estaba aislado, al otro día fue a la práctica y llevó el virus. Así que según salían los positivos los fuimos aislando, pero ahí fue que levantamos bandera y le dijimos que no podían compartir en el hotel porque se iban a contagiar y llevar el virus a la práctica”, agregó.

Otra teoría sobre cómo se regó el contagio

La otra probabilidad, admitió el médico, es un alegato de que al parecer varios se reunieron a jugar videojuegos en uno de los cuartos, dijo Molinary.

“El que está positivo y aislado, no puede estar poniendo su cuarto para jugar PlayStation. No puedo decir que haya sido eso, pero sí me lo comentaron, que es una posibilidad”, manifestó.

“Por eso es que la gente tiene que entender que así es que se comporta el coronavirus. Ninguno de los jugadores ha mostrado síntomas, pero se comparte en una casa, en una habitación, o en un lugar cerrado y se sigue propagando el virus”, dijo.

Benito Santiago hijo es uno de los integrantes de los Vaqueros. De un total de ocho contagiados en el equipo, siete son jugadores. No se han revelado los nombres de ninguno, aunque el dirigente Nelson Colón ayer declaró que entre los afectados hay jugadores de impacto en el equipo.
Benito Santiago hijo es uno de los integrantes de los Vaqueros. De un total de ocho contagiados en el equipo, siete son jugadores. No se han revelado los nombres de ninguno, aunque el dirigente Nelson Colón ayer declaró que entre los afectados hay jugadores de impacto en el equipo. (Suministrada)

En la burbuja, de acuerdo con Molinary, cada uno de los jugadores tiene que tener dos pruebas negativas antes de comenzar a jugar, y luego se les realizaría una prueba molecular semanal, cifra que podría aumentar si hay pruebas adicionales.

De detectarse un positivo con una molecular, al jugador se le intentaría verificar la prueba positiva con una de antígenos o anticuerpos, como medida para poder descartar falsos positivos, aunque el jugador sería aislado igual como medida de precaución.

En las filas de los Vaqueros, Molinary dijo que los primeros dos casos positivos llevan 11 y 12 días de aislamiento, respectivamente. Otros dos casos, registrados luego, ya llevan unos ocho días de aislamiento. Por lo que, para el momento en que lleguen a la burbuja en Río Grande, hasta los casos más recientes, detectados la pasada semana, tendrían ya 14 días o más de aislamiento para el momento en que les toque debutar, lo que debe suceder el 16 de noviembre.

La pre-burbuja nos dio el tiempo de identificarlos y aislarlos. Tan pronto me enteré que salieron otros positivos adicionales al final, llamé a Ricardo (Dalmau, presidente del BSN) y le dije que necesitaba completar al menos 12 días (de aislamiento) con los últimos positivos en Bayamón, cosa de que cuando entremos a la burbuja, podamos tener entre 12 y 14 días de (aislamiento) de ese positivo, para irme a la segura de que en el equipo de Bayamón tengan todos su pruebas negativas. Y por eso fue que se movió la entrada de Bayamón, por los últimos positivos, no porque fueron siete a la vez

-Dr. Luis Molinary

“Según el CDC desde que eres positivo o presentas síntomas eres contagiosos durante los primeros 10 días. Pero si las síntomas con severos con fiebre y dificultad respiratoria, ya lo que se recomienda son 14 días. Y aunque los muchachos han estado asintomáticos, y según las guías del CDC son 10 días los recomendados, nos estamos yendo más allá y pedimos espacio para que estos tengan más de los 10 días de aislamiento”.

“La pre-burbuja nos dio el tiempo de identificarlos y aislarlos. Tan pronto me enteré que salieron otros positivos adicionales al final, llamé a Ricardo (Dalmau, presidente del BSN) y le dije que necesitaba completar al menos 12 días (de aislamiento) con los últimos positivos en Bayamón, cosa de que cuando entremos a la burbuja, podamos tener entre 12 y 14 días de (aislamiento) de ese positivo, para irme a la segura de que en el equipo de Bayamón tengan todos su pruebas negativas. Y por eso fue que se movió la entrada de Bayamón, por los últimos positivos, no porque fueron siete a la vez”, explicó.

En resumen, la ‘pre-burbuja’ donde se registraron los casos positivos era para eso: para preparar mentalmente a los jugadores y detectar los contagiados y tratarlos antes de ir a Río Grande. De hecho, según Molinary, las guías de la ‘pre-burbuja’ eran que comenzaran al menos 14 días antes de la burbuja, pero Bayamón inició la suya antes de eso. Los Vaqueros llevan tres semanas aislados, viviendo en un hotel y viajando juntos ida y vuelta en autobuses.

Aunque se podría argumentar que el contacto físico en medio de un partido con un jugador contagiado es más complicado para prevenir el contagio, Molinary piensa que sobre la cancha es mucho más fácil que prevenir el contagio cuando los jugadores se congregan por horas en una misma habitación de hotel.

“Las recomendaciones del CDC indican que el contagio es más probable en situaciones de estar a menos de seis pies durante al menos 15 minutos con un infectado. En la cancha, un jugador tiene contacto con otro por unos segundos y es un ambiente más abierto que un cuarto de hotel. Si se juntan varios jugadores a jugar por horas, en un ambiente encerrado y con aire acondicionado, la cosa es totalmente diferente”, dijo Molinary.

El médico finalizó diciendo que si la hipótesis del PlayStation resulta ser cierta “pues saben que cometieron un error. Donde tuvimos positivos fue en una ‘pre-burbuja’ que era para prepararlos y tratar los positivos. Cometieron una indiscreción, y si aprendieron, y los demás equipos aprenden de esto también, esto no debería pasar en la burbuja”.