El doradeño Edgar Martínez ha hecho dos visitas en su vida al Salón de la Fama del Béisbol en Cooperstown, Nueva York.

Cuando estuvo allí, hizo el obligado tour al museo y a la Galería de los Inmortales del Salón de la Fama en la primera visita, y luego viviendo la experiencia de una ceremonia de exaltación en la segunda, Martínez asegura que jamás se ilusionó con la posibilidad que existe ahora de que el próximo martes él sea anunciado como un candidato a exaltación en el verano del 2019.

“Nunca pasó por mi mente. Bueno, no creo recordar que  haya pensado que sería chévere. Pero es que siempre he sido una persona de metas a corto tiempo. En mi carrera mis metas iban de tener un buen turno, a un buen juego, a una buena temporada. No fueron pensar ‘quiero llegar al Salón de la Fama’”, dijo Martínez a Primera Hora. “Si hacía las cosas así, sabía que al final de la temporada mis números iban a estar ahí. Y pensar así me liberó de mucha presión”.

Tras haber jugado de esa forma, y ciertamente tras haber vivido máxima presión cientos de veces cuando estuvo en conteo completo con hombres en posición de anotar y el juego en la línea, Martínez  toma con mucha calma su espera por conocer si finalmente este año recibirá el favor de los electores miembros de la Asociación de Escritores de Béisbol en América (Bbwaa) para recibir el llamado de exaltación en su último año de elegibilidad ante ellos.

“Estoy tranquilo. Todo es experiencia y ya llevo 10 años en estas. En especial los últimos dos. Pero nada como este, que hay mayor expectativa”, precisó Martínez, quien adelantó que el día en que se harán públicos los miembros de la clase de exaltación del 2019, en la que figuran también como potenciales elegidos los lanzadores Mariano Rivera, Mike Mussina y Roy Halladay estará en Nueva York de vacaciones con su familia celebrando el cumpleaños 16 de su hija Tessa.

 Estar en Nueva York tal vez será beneficioso, porque usualmente el Salón de la Fama presenta a los nuevos elegidos en una conferencia en dicha ciudad el día después de su anuncio. Pero Martínez asegura que estar allí es pura coincidencia, pues su hija cumple el día 21 y quería celebrar su natalicio en Nueva York para asistir a varias obras de Broadway.

Vendría a Puerto Rico

Lo que no será coincidencia, sino un obligatorio paso, sería venir a Puerto Rico en algún momento a celebrar su exaltación si se da este año, tal como presagia ahora mismo el listado de boletas hechas públicas que contabiliza un aficionado que se ha dedicado año tras año a documentar cómo han votado muchos de los electores. El trabajo de esta persona, actualizado a diario y compartido vía su cuenta de Twitter @NotMrTibbs, al día de ayer mostraba que Martínez cuenta con el favor del 90.6 % de los votantes que han revelado sus boletas emitidas. Ese  número  supera el mínimo del 75%  requerido para ser seleccionado. Y más significativo aún, según su data, el doradeño ha capturado este año 18 votos nuevos, aunque perdió uno de alguien que le favoreció el año pasado, quedando técnicamente a tres boletas de alcanzar los 20 votos que le costaron su elección el año pasado.

“Sin dudas iría a Puerto Rico, pero todavía no sé cuando. En Nueva York tengo también un compromiso de acudir a un show de firmas de autógrafos el día 27, y luego el 28 tengo que ir a Seattle a unos compromisos. Pero ya después de eso buscaré una fecha, si se me da”, prometió el también excoach de bateo de los Marineros, quien vendría a celebrar con su gente de Maguayo y con su madre, quien reside en Hatillo.

 El temible bateador designado que en su carrera de 18 temporadas bateó .312 con 309 jonrones, 514 dobles, 1,219 carreras anotadas y 1,261 remolcadas, abundó que ciertamente tiene que venir porque para él será un honor máximo ser el quinto boricua en Cooperstown. 

“Siempre ha sido un honor”

“Para mí siempre ha sido un honor inmenso ser mencionado como candidato a estar con Roberto Clemente, Orlando Cepeda, Roberto Alomar e Iván Rodríguez en el Salón de la Fama. Si se  da este año el ser elegido, el honor será aún más inmenso”, apuntó, destacando además que espera que tras de él reciban algún día el llamado al recinto vía el panel de veteranos los toleteros Carlos Delgado, Juan ‘Igor’ González y Bernie Williams, y vía elección de los escritores Yadier Molina y Carlos Beltrán.

“Beltrán y Yadier deben ser una línea. Y Delgado, Igor y Bernie definitivamente tienen los números. En el caso de Bernie sus números de postemporada no pueden pasar desapercibidos por el panel”, señaló al recordar que ese trío final dejó de ser considerado por los escritores al no recibir el mínimo de un cinco por ciento de favor en una elección para poder mantenerse en la boleta durante el máximo de 10 años que Martínez  ha estado hasta este año.

El padre de tres, Alex de 24 años, Jackeline de 14 y Tessa, a días de los 16, abundó que estará pendiente el martes al anuncio de los jugadores electos junto a ellos y su esposa.

Obviamente le agradaría la idea de ser seleccionado, pero tampoco se ilusiona para no llevarse una desilusión. Ese es el mismo pensamiento que tienen todos en su familia.

“Para nosotros el tema del Salón de la Fama no es algo que lo hablemos mucho. Usualmente son los amigos, mis excompañeros de equipo quienes siempre lo mencionan. Yo en cambio siempre me mantengo ocupado con mis negocios, inversiones y compromisos”, dijo Martínez.

En fin, que como lo hizo en el plato, lo toma un turno a la vez.