Luego de una semana sin jugar, los Criollos de Puerto Rico harían este lunes en la noche un juego simulado en el estadio Hiram Bithorn para agarrar ritmo nuevamente, ahora hacia la Serie del Caribe que inicia el 1 de febrero en Miami, Florida.

El juego del lunes sería uno entre los mismos jugadores de los Criollos con alguna ayuda de jugadores del Béisbol Superior Doble A para completar el grupo.

Los Criollos harán lo mismo este martes, antes de concluir su ‘campamento primaveral’ el miércoles con una práctica ligera y viajar ese día hacia Miami, sede de la Serie del Caribe en el estadio loanDepot.

Su dirigente Yadier Molina espera que los jugadores regresen al ritmo luego de haber estado inactivos de juego en vivo desde el domingo, 20 de enero, cuando los Criollos se coronaron campeones de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente y se convirtieron en los representantes de Puerto Rico en Miami.

“Esa es la idea: que los bateadores vean lanzadores y que los lanzadores vean bateadores. Sabemos que llevamos una semana sin jugar y volvemos a jugar siete entradas”, dijo Molina.

Puerto Rico definió bastante temprano a su representante para el clásico caribeño, en comparación con República Dominicana y Venezuela, que vieron a los Tigres de Licey y a los Tiburones de La Guaira coronarse, respectivamente, el sábado y domingo.

Los Criollos inauguran en la Serie del Caribe el 1 de febrero ante Nicaragua.

El ‘campamento primaveral’ de los Criollos lleva realizándose en el estadio Hiram Bithorn desde el jueves. Allí tuvieron ese día su primera práctica de bateo, bullpen y defensa, además de la reagrupación del equipo con los nuevos integrantes que le refuerzan, como Bryan Torres y Heliot Ramos.

El ‘campamento’ también ayuda en la integración del más reciente refuerzo del equipo, Trei Cruz, el hijo de José ‘Cheito’ Cruz y nieto de ‘Cheo’ Cruz. El jugador estuvo activo con los Leones que se eliminaron en las semifinales de la Roberto Clemente y se integra a los Criollos.

“Estamos bien contento de que Trei Cruz tenga esta experiencia. Creo que sería la tercera generación. Puedes ver la alegría en él y de su papá, con quien hablé. Es bueno para su futuro y desarrollo”, dijo el gerente general de los Criollos, Jesús ‘Motorita’ Feliciano.