Orlando, Florida. Sonriente, feliz, expectante...

Así se siente la medallista olímpica Jasmine Camacho-Quinn horas antes de su llegada a Puerto Rico hoy, martes, para celebrar con su país la presea de oro que obtuvo en los Juegos Olímpicos de Tokio.

En la isla también se encontrará con su familia, a quienes no ve desde que salió a competir a Japón.

“No sé qué esperar, viendo a ver qué pasará”, expresó la vallista de velocidad a su llegada al terminal de la línea aérea JetBlue que la llevará a Puerto Rico este martes.

La atleta reconoció que está ansiosa de ver a su familia, y entiende que será un momento muy emotivo cuando finalmente pueda abrazarlos.

Relacionadas

“Definitivamente quiero verlos. Extraño a mi familia mucho”, apuntó la deportista. “Va a ser un momento muy emocionante, pero estoy preparada para ver a mi familia”, añadió Camacho-Quinn, que llegó sola a la zona de abordaje.

La campeona olímpica de los 100 metros con vallas llegará al Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín, en Carolina, cerca de las 10:20 a.m. en un vuelo procedente de Orlando. Durante su paso por el aeropuerto de Internacional de Orlando, varias personas le solicitaron fotos. Además, la atleta fue saludada por los altavoces del avión y los pasajeros le ofrecieron un caluroso aplauso que la competidora recibió con una gran sonrisa. Las azafatas también aprovecharon para retrartarse con ella.

En la isla, Camacho-Quinn participará de una serie de actividades, entre las que se encuentra una caravana que pasará por áreas de San Juan y Trujillo Alto.

Al hablar de la actividad de reconocimiento, sostuvo que aunque sabía que no sería como la de Mónica Puig, en la que hubo una fiesta de pueblo con una tarima, estaba contenta de poder ver a las personas desde una guagua y saludarlas.

“Me parece muy bien que pueda saludar a las personas y verlas”, apuntó.

Igualmente, Camacho-Quinn se mostró feliz al saber que su gesta en Tokio le trajo “esperanza y alegría” al país. “Poder traer esperanza y alegría todo el mundo significa mucho. Han sido unos años difíciles para mí. He trabajado duro para no defraudar a nadie. Así que poder traer alegría a las personas significa mucho y espero traer más”.

La deportista se va el jueves dado que tiene un compromiso deportivo en el Meeting de París, una de las paradas de la Liga Diamante que se llevará a cabo el 28 de agosto.

Al rememorar el momento en que subió al podio a recibir su presea dorada, la vallista de velocidad compartió que recordó el momento que vivió en las Olimpiadas de Río cuando se tropezó en la semifinal de su evento y no pudo culminar la carrera. En ese momento, Camacho-Quinn iba al frente y se esperaba que llegara a la final.

“Cuando me subí al podio tuve un recuerdo del 2016, y el hecho de que esta vez lo pude lograr (ganar una medalla) es una redención”, dijo Camacho-Quinn, quien reconoció que tras haber por momentos difíciles sabía que se merecía esa medalla.

La atleta llegará en un vuelo procedente de Orlando, Florida.