Ronda Rousey defendió con éxito el pasado sábado su correa de campeonato división gallo de Ultimate Fighting Championship (UFC) al derrotar a la brasileña Bethe Correia mediante sumisión a los 34 segundos del primer asalto, enfrentamiento que marcó su sexta defensa titular.

Rousey ciertamente se ha convertido en una de las figuras emblemáticas de las artes marciales mixtas, en especial por su récord invicto en la disciplina y su predilección de derrotar a sus rivales mediante sumisiones de brazos. El éxito que Rousey ha experimentado en el octágono, sin embargo, es una extensión de las grandes actuaciones que tuvo durante sus años como judoca para el equipo de los Estados Unidos, con quienes ganó medallas mundiales, panamericanas y olímpicas.

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Rousey comenzó su carrera en el judo a los 11 años al seguirle los pasos a su madre AnnMaria De Mars. A los 17 años clasificó a sus primeros Juegos Olímpicos (Atenas 2004). Aunque no obtuvo medalla en Atenas, Rousey cosechó triunfos en Mundiales y Juegos Panamericanos, incluyendo una presea dorada en la edición de 2007 en Río de Janeiro, Brasil.

La elusiva medalla olímpica llegó un año después, en los Juegos de Pekín, China, en el 2008, cuando se convirtió en la primera judoca estadounidense en obtener una medalla olímpica (bronce). Aunque Rousey perdió su combate de semifinales ante la holandesa y ex campeona mundial Edith Bosch, derrotó a la alemana Annett Böhm en la ronda de perdedores para subir al podio.

El resto, como dicen, es historia. Rousey debutó en las artes marciales mixtas en el 2010 bajo el estandarte de la empresa Tuff-N-Uff, donde ganó tres combates, sin derrota alguna. Para el 2011 celebró y ganó su primera reyerta profesional contra Ediane Gomes, a quien derrotó mediante su ya reconocida sumisión de brazo.

Y para el 2012 se proclamó campeona de la desaparecida empresa Strikeforce al imponerse a Miesha Tate. Actualmente, Rousey es la campeona peso gallo de UFC, pero la atleta californiana ha encontrado la manera de convertirse en una figura importante fuera del octágono, pues ha modelado y también ha tenido papeles importantes en tres películas, la tercera entrega de la serie The Expendables de Sylvester Stallone, además de roles en Furious 7 y un papel semi protagónico en la película de la serie de HBO Entourage.

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