Con la misma sensibilidad, la vocalista captó el espíritu de la pequeña, que murió el pasado 17 de septiembre, al dedicar una segunda copia de la pieza con las palabras “Love & Light” (amor y luz). 

Para que la intérprete de “Roar” conociera la historia de Alejandra Sofía, su carisma, carácter solidario, su compromiso para denunciar el bullying y la devoción que esta sentía por ella, su madre, Dasha M. Ryan, le escribió una carta que le fue entregada con el cuadro por miembros de la producción del concierto. Y aunque no pudo estar presente en ese momento, Ryan está segura de que Perry leyó la misiva por la dedicatoria que plasmó en la pintura. 

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“Alejandra era un ser de amor y luz. Más claro ella no la pudo describir”, afirmó la progenitora a Primera Hora. 

“Por la palabra ‘light’, estoy segura de que sí (la leyó). Por el ‘amor’, amor puede ser muchas cosas, puede referirse al afecto, pero tan pronto yo leí ‘light’, yo dije: ‘ella leyó la carta’ porque Alejandra, con todo lo que me ha enseñado y todo lo que he escuchado que ha impactado, sí, era un ser de luz. No me cabe la menor duda”, manifestó. 

La mamá de Alejandra Sofía considera que todo en la vida sucede por algún motivo, y que la niña dejara en su libreta una pintura de la también compositora no es casualidad. Tampoco lo fue, a su juicio, que la menor solicitara que la llevaran al concierto de la gira Prismatic World Tour, cuando no era usual que ella les pidiera algo a sus padres.

“Alejandra nunca pedía nada. Cuando ella me pidió ir a ese concierto, ella iba con su papá y su hermana, y yo a través de unas amistades quería comprar las mejores taquillas para que ella tuviera los mejores asientos porque como nunca me pedía nada, yo quería los mejores asientos para ella. Por alguna razón Alejandra seleccionó a Katy Perry. La canción ‘Firework’, su canción favorita más a fin no podía ir con la forma de pensar de Alejandra”, abundó.

“Yo quería que ella viera que en el talento que tenía mi hija, en su capacidad de impactar gente, ella la seleccionó a ella, y no solo porque era una fan”, agregó la madre. 

Asimismo destacó y agradeció la ayuda de personas cercanas a la producción que sin conocer a Alejandra Sofía, al enterarse de su historia, hicieron todo lo posible por brindarle a su familia un recuerdo memorable de la cantante favorita de su hija. 

A pesar de la tristeza por la reciente pérdida de su niña, para Ryan fue una noche de muchas emociones. 

“Yo no te puedo negar que yo tenía una tristeza inmensa en ese momento, pero a la misma vez la solidaridad que hubo me dio demasiada fortaleza, y sentí alegría porque ella hubiera querido eso. Mi tristeza era que ella no pudo estar ahí para recibir el cuadro (autografiado) Mi preocupación más grande cuando se llevaron el cuadro era que lo valoraran, que no lo vieran como un dibujo más de una nena porque si no, no me interesaba”, explicó.

“Me interesaba que ella supiera que una niña muy especial la seleccionó a ella porque entendía que ella (Perry) lleva un mensaje alineado con lo que ella (Alejandra Sofía) pensaba”, subrayó al agradecer las gestiones del promotor Alejandro Pabón Castrodad; el vicepresidente de Cervecera de Puerto Rico, Jorge Bracero; y el gerente de marca de Medalla Light, Gabriel de Cárdenas para hacer posible la entrega del cuadro a la artista y la dedicatoria en la copia que ella guardará.

La pintura dedicada por la también productora será colocada en la habitación de la pequeña pintora, junto al resto de las obras que esta realizó, muchas de ellas para denunciar el acoso escolar a niñas cercanas a ella y concienciar sobre este problema social. 

Alejandra Sofía fue la creadora de la exposición “Chicas by Alejandra”, cuyas obras se venden para destinar parte de los recaudos al Hogar de Niñas Teresa Toda en Loíza. La institución ayuda a niñas víctimas de violencia y acoso a poder tener una educación.