Con la voz entrecortada y ojos llorosos, Gloria Trevi revivió dos de los episodios más oscuros y difíciles de su vida, Sergio Andrade y la muerte de su hija Ana Dalay.

La cantante se considera una sobreviviente, no sólo de Andrade, de quien pensó estar enamorada, sino también de sus propios miedos, como el que tuvo de volverse a parar en un escenario tras salir de la cárcel.

En entrevista con el programa español “Viajando con Chester”, la cantante reconoció que estuvo 17 años bajo el dominio e influencia de Sergio Andrade, quien le golpeó el autoestima de tal forma que se sentía fea y no amada, dijo que a los 30 años se sentía decadente, y ahora, a sus 54, se siente espectacular y más joven que cuando tenía 20.

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Gloria lamenta que años después de que fue juzgada, su reputación siga en duda, pero a pesar de ello, se alegra de que sus fans la sigan acompañando en su camino artístico.

“Si no estuviera esa reputación tan dañada, porque está dañada todavía, hoy, yo no estaría llenado arenas, yo estaría llenando estadios, por ejemplo un Super Bowl”, consideró.

En enero de 2000, Trevi, su exrepresentante Sergio Andrade y María Raquenel Portillo, conocida como “Mary Boquitas”, fueron detenidos en Río de Janeiro (Brasil) bajo cargos de rapto, violación y corrupción de menores.

Trevi pasó tres años en la cárcel y fue extraditada a México, donde fue absuelta y recuperó su libertad en septiembre de 2004, después de que un juez dictaminara que no había pruebas suficientes para respaldar los cargos de violación, secuestro y corrupción de menores presentados en su contra.

“Tenía mi lealtad en las personas equivocadas”, reconoció Gloria, quien después de quedar libre, retomó su carrera artística que actualmente se mantiene activa.

Ana Dalay, el gran dolor de Gloria Trevi

En la entrevista con Risto Mejide, Gloria Trevi dejó rodar sus lágrimas cuando fue cuestioada sobre qué pasó con Ana Dalay, la hija que tuvo con Sergio Andrade.

Para la cantante, cada 10 de octubre es especial, porque fue el día que murió su hija, con apenas un mes de nacida; la causa de la muerte habría sido muerte de cuna, al menos es lo que a ella le dijeron y lo que cree que pasó, pues recuerda que fue un momento en el que entró en shock y estaba aterrada.

Lamenta que Sergio Andrade haya ordenado que le mintieran sobre el último paradero de su hija, pues le aseguraron que su bebé tenía acta de defunción y que la habían enterrado en un lugar cristiano, pero esto no fue cierto.

Gloria recuerda que cuando los detuvieron en Brasil estaba muy reciente la muerte de su hija, por lo que ella se encontraba en un estado como de anestecia, no le importó estar presa, pues su dolor por la pérdida de su hija superaba todo.

“Había perdido a mi hija dos meses antes; cuando a ti te amputan las extremidades no sientes un granito; yo no sentía, no me importaba, en la foto donde me ficharon salí sonriendo porque pensé en mis padres, no quería que me vieran asustada, también pensé en los que me odiaban y no quería que se burlaran más; qué podía ser perder tu libertad cuando no la tenías”, expresó.

Sobre si se arrepiente de algo que hizo en el pasado, Gloria es clara al decir que no.

“No me arrepiento, él es el que tiene que arrepentirse, yo no”, dice refiriéndose a Sergio Andrade, quien casi le triplicaba la edad a ella y a las jóvenes pertenecientes al llamado, en esa época, clan Trevi-Andrade.

Aunque parece que ese pasado ya quedó atrás, Gloria confiesa que tiene miedo, pues ahora goza del amor de su esposo, con quien lleva casi 20 años de relación y tienen un hijo.

“Tengo tantas cosas ahorita que a veces tengo miedo, ahora sí tengo mucho que perder”, reveló.

A pesar de todo el dolor que le trajo conocer a Sergio Andrade, considerado por muchos un depredador sexual, Trevi asegura que no borraría nada de su pasado, porque eso sería borrar a su hija Ana Dalay y a su hijo Ángel, quien nació cuando ella estaba en la cárcel.