En 2023 la actriz Halle Bailey sorprendió al mundo con su actuación como Ariel en el live action de The Little Mermaid, y meses después volvió a hacerlo al revelar que, a sus 24 años, se había convertido en madre.

Y aunque muchos dicen que la maternidad es la etapa más feliz de la vida de una mujer, Halle quiso visualizar el otro lado de la moneda y reveló que atraviesa por una seria depresión posparto.

Mediante un video de Snapchat, la también cantante explicó a sus seguidores que su nuevo rol de madre ha sido un tanto complicado, al grado de que lo comparó con “nadar en este océano que está compuesto por las olas más grandes que jamás hayas sentido”, dijo.

Relacionadas

Sin embargo, también aclaró que la depresión que enfrenta no tiene nada que ver con su pequeño Halo, de apenas tres meses, sino porque le ha resultado sumamente difícil compaginar su carrera con sus tareas de mamá, incluso, que separarse de su hijo le cuesta muchísimo trabajo.

“No sé si alguna nueva mamá puede identificarse, pero es hasta el punto en que es realmente malo. Es difícil para mí estar separada de mi bebé por más de 30 minutos seguidos antes de que empiece a enloquecer”, agregó.

Halle también aseguró que aunque había escuchado hablar de esta situación, nunca le tomó la importancia que merecía, por lo que creyó que hablar de su experiencia podría ayudarla a otras mujeres que estén pasando por lo mismo que ella: “Cuando me miro en el espejo, siento como si estuviera en un cuerpo completamente nuevo. Como si no supiera quién soy. Antes de tener un hijo y escuchar a la gente hablar sobre el posparto, simplemente entraba por un oído y salía por el otro. No me di cuenta de lo serio que era en realidad”.

La película estrenará este próximo el 26 de mayo.
¿Qué es la depresión posparto?

De acuerdo con el DSM-V, es similar a un episodio depresivo mayor, “con la particularidad de que aparece en el embarazo o durante las primeras cuatro semanas después del parto”, sin embargo, puede extenderse hasta el primer año posparto.

Los síntomas incluyen una baja de ánimo, alteraciones del sueño y de la alimentación, ansiedad, sentimientos de culpa y pérdida de placer, entre otros.

La depresión posparto requiere de atención especializada, como se verá más adelante, ya que, por lo general, no se resuelve sin tratamiento.