Lula González y su hija Liza Gutiérrez asistieron temprano al culto en la iglesia Luterana de Dorado, y luego llegaron a eso de las 9:10 a.m. del domingo al Coliseo Roberto Clemente, para mostrar sus respetos y despedir a José "Cheo" Feliciano en el último día del velorio del artista en San Juan.

Gutiérrez, de 48 años, dijo: "Aprovechamos que salimos de la iglesia porque el servicio era temprano para darle el pésame a la familia y dar nuestros respetos".

Por su parte González, de 77 años, agregó que “era tremendo ser humano, definitivamente lo vamos a extrañar. Puso el nombre de Puerto Rco en alto en diferentes partes del planeta".

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Feliciano falleció el Jueves Santo en un accidente de tránsito en la carretera PR-176, camino a su casa en la urbanización Venus Gardens, en Río Piedras. Será sepultado mañana, lunes, en Ponce.

Como González y Gutiérrez, había decenas de personas más que se acercaron a la institución deportiva sanjuanera que abrirá sus puertas a la 1:00 de la tarde para el segundo y último día de despedida a Cheo en San Juan.

Ana Cruz, por ejemplo. La mujer de 60 años y vecina de Río Piedras tomaba fotos con una cámara en las afueras del coliseo. "Ahora mismo no hay nada. Voy a ver familia en Humacao y luego vengo a verlo por última vez", indicó.

Como pasó con muchas más personas -algunas de las cuales dijeron que venían "a ver al muerto"-, las mujeres fueron orientadas por policías municipales. El teniente de la Policía Municipal de San Juan Roberto Casado fue uno de los que expresó que las instrucciones son abrir las puertas del coliseo a la 1:00 p.m. para el público general.

"Esperamos más público (que el sábado), supuestamente vienen muchos cantantes prominentes", indicó el teniente Casado. Otros agentes municipales dijeron que desde las 8:00 a.m. había gente llegando al coliseo.

El itinerario de los eventos suministrado a la prensa indica que hay guardias de honor a las 3:00 p.m. por miembros de El Gran Combo de Puerto Rico, a las 4:15 p.m. con Víctor Manuelle, Luis Enrique y Gilberto Santa Rosa, a las 5:00 p.m. los Salsa Giants, y a las 5:30 p.m. miembros de la Fania All Stars, quienes también tocarían varias canciones a partir de las 6:30 p.m.

En el interior de la estructura, estaba el féretro de Feliciano junto a unas 23 coronas florales, algunas de artistas como Marc Anthony, José Alberto "El Canario", Lalo Rodríguez, Domingo Quiñones, Tito Nieves, Lalo Rodríguez, Adalberto Santiago, así como de empresas como el Ambasador Plaza y Copa Airlines, y una del consulado bolivariano de Venezuela, entre otras.

Asimismo, había una enorme bandera de Puerto Rico (de 30 x 50 pies) colgando del techo, y una más pequeña al lado del féretro de Feliciano y de dos carteles con el rostro del cantante con la frase "Familia".

 A pesar de que a las personas que llegaron al lugar temprano se les orientaba que habría que esperar hasta la 1:00 p.m. para entrar, hubo decenas que esperaban afuera, parados o sentados en bancos de cemento frente al coliseo, donde escuchaban canciones como el bolero "Amada Mía" y otros temas de Cheo, esto desde las bocinas de una guagua de sonido de un sindicato obrero.

Jesús Resto, de 67 años, contó que la última vez que vio a Feliciano fue hace dos sábados, en una bohemia organizada por el Municipio de Carolina. Dijo que comentó desde la tarima que le dolía uno de sus brazos, pero que "sabía llevar el dolor". Su voz, sin embargo, se oía como siempre, comentó.

"Lo sentí mucho, era mi ídolo. Mis canciones favoritas eran las de él", indicó el carolinense, enumerando entre sus temas favoritos "Los entierros de mi gente pobre", "Anacaona" y "Amada Mía".

La colombiana Salma Ruiz, quien reside en Bayamón hace 30 años, era una de las decenas de personas que a las 10:30 a.m. aguardaban por entrar al coliseo. Sonrió cuando se le preguntó cuántas veces había bailado "Amada Mía", que dijo era una de sus canciones favoritas, en una loseta.

"Imagínese, desde niña oía su música. Los artistas de Puerto Rico se les respeta en Colombia, Panamá, toda Sudamérica, los vemos y los respetamos mucho", dijo Ruiz.

Varias personas llegaron desde temprano en la espera para entrar al velatorio.
El concierto inició con la petición de un minuto de silencio y luego una ovación de pie para Cheo.