Contar con una buena salud es algo que todas deseamos. Sea la edad que se tenga, este denominador común siempre está presente.

 Aunque existen sus excepciones, especialistas en salud concuerdan en que a mayor edad, más condiciones de salud podemos padecer.  Ante esta realidad,  existen algunas condiciones que se manifiestan con mayor frecuencia en las mujeres de 50 años o más.

 Para prevenir este desenlace o, si ya padeces de alguna de las siguientes condiciones, la doctora Rocío E. López, experta en medicina funcional, y la entrenadora personal Mairym Villalobos ofrecen los siguientes consejos.

Diabetes

La diabetes tipo 2, afecta sobre 30 millones de personas en Estados Unidos, incluyendo Puerto Rico. Ya no es una enfermedad del “viejo” como solían decirnos, pues cada vez es más frecuente ver a personas muy jóvenes con este diagnóstico. También es alarmante conocer que cada vez más los  niños padecen de la condición. 

Lo más importante es que esta  enfermedad es  100 por ciento prevenible, depende del  estilo de vida y alimentación que adoptemos.

Nutrición:  Para prevenir o controlar la diabetes, López  aconseja evitar el exceso de harinas y carbohidratos, además de abstenerse al consumo de refrescos y bebidas azucaradas. Además, de acuerdo con un nuevo estudio que  se presentó en la reunión 2015 de Biología Experimental en Boston y  fue reseñado por diario El Mercurio, el consumo habitual de nueces ayuda a prevenir el deterioro cognitivo de las personas mayores, y tiene un impacto positivo en la salud digestiva y cardiovascular. Asimismo, tomar ácido alfa lipoico es esencial para estabilizar los altibajos de azúcar y el metabolismo de los carbohidratos, dice la especialista.

Ejercicios:  El ejercicio mejora el metabolismo de la glucosa y ayuda a controlar el peso, la presión arterial y el colesterol. Por tal razón Villalobos  recomienda realizar ejercicio cardiovascular siempre a la misma hora para que este funcione como un tipo de insulina natural y ayude a mantener estable  los niveles de glucosa en sangre.  

Enfermedades del corazón

Las enfermedades del corazón son un asunto serio. Tan es así que, de acuerdo a las estadísticas del Departamento de  Salud, las condiciones cardiovasculares son consideradas  la principal causa de muerte en Puerto Rico, por encima del cáncer y la diabetes. Pero no todo está perdido. De  acuerdo con especialistas en la salud, puedes evitar problemas cardíacos en el futuro si adoptas un estilo de vida saludable.

Nutrición: En cuanto a cuidar el corazón, se debe evitar  la azúcar, la harina  o  los carbohidratos refinados. Asimismo, aléjate de  las grasas hechas en alguna fábrica, y solo consume grasas como, por ejemplo, el aceite de olivo, semillas y nueces,  aceite de coco. Consumir algún otro tipo de grasa diferente a la mencionada es el principio de la obstrucción de arterias y venas, el inicio de la inflamación que endurece las paredes del sistema cardiovascular y te lleva a padecer obstrucciones o disfunciones cardiacas o venosas. Supleméntate con CoQ10, niacina, omega 3 o aceite de hígado de bacalao. Evita los suplementos de calcio artificial pues es el principal culpable de las calcificaciones de arterias y venas, solo utiliza calcio orgánico de Cristales de Hidroxiapatita (MCHC), aconseja López.

Ejercicios: Cumplir con la recomendación de actividad física para prevenir el sobrepeso, la obesidad y en particular la obesidad abdominal, es la mejor manera de eliminar los factores que pueden conducir en el desarrollo de diferentes enfermedades cardiovasculares. El ejercicio durante 30 a 60 minutos, casi todos los días de la semana, te ayudará a mantener un corazón saludable. Disminuye el tiempo que estás quieta: usa las escaleras, estaciónate lejos de la entrada y pasea el perro. También, realiza calentamiento progresivo y gradual, e hidrátate adecuadamente durante la sesión de ejercicios con sorbos pequeños de agua. Pero ojo, si la presión arterial es mayor de 140/90 debes realizar actividad física.

Osteoporosis

Aunque esta condición se ha etiquetado como una enfermedad del envejecimiento,  la especialista en medicina funcional ha constatado que también la pueden padecer  jóvenes  de 25 años, quienes ya  tienen un diagnóstico de osteopenia y osteoporosis.

Así que el cuidado de los huesos debe ser clave del envejecimiento saludable, y mientras más jóvenes iniciemos, mejor.

Nutrición:  La salud de los huesos depende  de una alimentación rica en calcio, pero la doctora López insiste en que  debe ser calcio orgánico de hidroxiapatita ya que esta es la única molécula de calcio que nuestro cuerpo reconoce como apropiada para los huesos. Si consumimos cualquier otro tipo de calcio, como el calcio de coral, calcio citrate, calcio malate, no todo podrá llegar al hueso. Existe una alta probabilidad de  que nuestro cuerpo lo deposite en diferentes partes, y no en el hueso, tales como articulaciones, músculos, ligamentos, riñones, arterias y venas. De ahí que desarrollamos múltiples calcificaciones, pues el cuerpo no sabe dónde meter todo ese calcio y termina guardándolo en el primer lugar que puede. Con el tiempo, esas calcificaciones nos van a dar problemas. Debes ser cautelosa con las comidas etiquetadas como “enriquecidas con calcio” pues  es mejor consumir alimentos que son ricos en calcio de forma natural, que no se les agregó calcio artificialmente. Nuestros huesos necesitan de otros nutrientes para que  el calcio  llega adecuadamente al hueso; asegúrate de suplementarte con magnesio, silica, boro, colágeno, glucosamina sulfato, ácido hialurónico, vitamina C, vitamina D, vitamina K y vitamina A.

Ejercicios:  Realizar ejercicios multiarticulares (que involucren la mayor cantidad de músculos y articulaciones posible) es la mejor manera para evitar y tratar la osteoporosis, según explica Villalobos. Realiza ejercicios en los cuales levantes peso extra (máquinas, pesas libres, bolas medicinales y otros). Evita las flexiones frontales y ten mucho cuidado con fracturas que puedan causar caídas.