Johannesburgo. La vacuna monodosis desarrollada por la compañía Johnson & Johnson contra el COVID-19 arroja resultados positivos en Sudáfrica contra las variantes delta y beta, y la respuesta inmune sigue siendo buena al menos hasta ocho meses después de su aplicación, confirmaron hoy científicos sudafricanos.

En una rueda de prensa este viernes, la doctora Glenda Gray, presidenta del Consejo de Investigación Médica de Sudáfrica (SAMRC, siglas en inglés), indicó que los estudios realizados en el país demuestran una “duración sorprendente” de la respuesta inmune de la fórmula monodosis, aunque hay que seguir monitoreando su evolución ya que hasta ahora tienen datos de un periodo de ocho meses.

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“En conclusión, la vacuna Johnson & Johnson funciona bien en Sudáfrica con la difícil variante beta que tenemos. Todos los datos que hemos visto revelan una buena respuesta inmediata y sostenida contra la variante delta y vemos una duración sorprendente (de la respuesta inmune para una sola dosis)”, señaló Gray.

Estos datos vienen avalados tanto por estudios de laboratorio como por el bajo número de infecciones graves detectadas entre los trabajadores sanitarios sudafricanos a los que se les administró la monodosis de Johnson & Johnson como parte de un gran estudio de aplicación iniciado por SAMRC a mediados de febrero pasado.

Del casi medio millón de personas inmunizadas bajo esa iniciativa, solo un 1% se infectó y, del total de esos contagios, el 98% supuso enfermedades “suaves”; el 4% de los infectados tuvo síntomas moderados y solo el 2% desarrolló un cuadro grave.

Los datos recopilados por SAMRC, además, apuntan a que la fórmula desarrollada por la farmacéutica Janssen para Johnson & Johnson “funciona mejor”, recalcó Gray, contra la variante delta (la detectada por primera vez en la India) que contra la beta (identificada por especialistas sudafricanos a finales de 2020).

Estas noticias son especialmente esperanzadoras dado el rápido avance de la variante delta en Sudáfrica y en otras partes de África, donde el acceso a vacunas sigue siendo muy escaso (solo el 2.66% ha recibido alguna dosis).

La variante delta está presente ya en 13 naciones africanas y su expansión está disparando los contagios en la presente tercera gran ola de COVID-19 a nivel continental, con situaciones mucho más criticas a nivel sanitario que las registradas en el pasado.

En Sudáfrica, epicentro del virus con casi 2 millones de contagios acumulados, la variante delta está desplazando incluso a la variante beta, que a su vez había borrado prácticamente la presencia de las versiones previas del coronavirus.