Una de las claves para tener una salud perfecta es incluir vitaminas y minerales esenciales en nuestra alimentación; la mejor manera de hacerlo es consumiendo frutas y verduras. Los jugos verdes te ayudarán a que tu organismo resista mejor las enfermedades.

En estos días de cuarentena y encierro debido a las medidas preventivas para evitar el contagio del coronavirus COVID-19, todos estamos preocupados sobre qué hacer para evitar caer enfermos, no solamente con este virus, sino en general, pues los servicios de salud están trabajando a tope en el control de la pandemia, de manera que hoy, más que nunca, es importante procurar mantenernos sanos.

Ya conocemos de sobra las medidas preventivas para evitar el contagio del COVID-19: mantener una sana distancia de por lo menos seis pies entre persona y persona, lavarnos las manos frecuentemente con agua y jabón o con un desinfectante con base de alcohol y durante por lo menos 20 segundos, cubrirnos la boca y nariz con el codo al toser y estornudar, y evitar tocarnos ojos, nariz y boca.

Pero, además de cumplir con estas acciones básicas de protección y de mantenernos lo más encerrados posible, ¿qué más podemos hacer para cuidarnos? Algo importante que sí es posible lograr desde nuestra casa es fortalecer nuestro sistema inmunológico a través de lo que comemos y de un par de sencillas recomendaciones como dormir bien, hacer ejercicio, tomar mucha agua y evitar, en lo posible, el estrés.

Los jugos verdes suelen incluir frutas para hacerlos más dulces y agradables al paladar, tú puedes hacer tus propios jugos con los ingredientes vegetales que más te gusten, pero recuerda que a más frutas, más calorías; en otras palabras, mientras más verde, mejor.

Opción 1

2 pepinillos grandes con cáscara

3 tallos de celery

1 tallo grande de brócoli

2 o 3 hojas de kale

1 limón con la parte blanca de la cáscara

2 manzanas o peras

1 o 2 raíces de jengibre peladas

agua

Opción 2

1 taza apretada de espinaca y kale, picados

1-1/2 tazas de leche de almendra

1-1/2 tazas de mango, piña y kiwi pelados, en trozos y congelados, combinados o de una sola de estas frutas, según prefieras

1/2 cucharadita de raíz de jengibre, pelada y rallada

jugo de medio limón

Opción 3

3 hojas de lechuga romana

2 tallos de celery

1 taza de kale no finamente picado

1 taza espinaca no finamente picada

1 manzana verde

1/2 pepinillo grande

1/2 raíz de jengibre pelada

1/2 limón con la parte blanca de la cáscara

1 puñito de hojas de perejil

agua

Procedimiento

Lava bien los ingredientes y córtalos en trozos medianos para que tu licuadora o extractor los pueda moler bien, añade cubos de hielo si quieres que tu jugo esté frío. Muele y después añade la suficiente agua para que quede con la consistencia que prefieras, más o menos líquido, y vuelve a moler. Bébelo en cuanto lo termines de preparar, si no, los nutrientes se empiezan a degradar al contacto con el oxígeno del ambiente.

NOTA: Si apenas vas a empezar a tomar jugos verdes, es mejor que introduzcas el kale poco a poco; es un superalimento, buenísimo para ti, pero tiene un sabor fuerte. Ve aumentando la cantidad según te vayas habituando a su gusto.