Cuando el ex atleta olímpico Bruce Jenner abrió su corazón al mundo para compartir su verdadera identidad de género, no solo obtuvo la comprensión y empatía de sus tres ex esposas, sino también de un sinnúmero de personas que se volcaron en expresiones de apoyo a través de las redes sociales.

Aunque puede parecer difícil colocarse en los zapatos de la pareja cuando se hace una confesión como esa, ser empático y tratar de comprender la situación del que lucha internamente con su identidad sexual es precisamente lo que se recomienda en estos casos, indicó la sicóloga Libna Sanjurjo. 

“Debe tratar de verlo a  él con mucha compasión. Estas personas que tienen estos issues de identidad sexual no se les hace fácil. Ella debe entrar en un proceso de ser compasiva, de ser empática con él, de poder entenderlo. Eso la va a ayudar mucho a poder lidiar con su coraje y con sus emociones. Debe buscar ayuda individual para aprender a trabajar con las inseguridades, porque se pueden levantar muchas inseguridades a raíz de la confesión que podrían afectar su autoestima y su seguridad en sí misma”, explicó la experta en conducta humana.

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La semana pasada, la estrella de Keeping up with the Kardashians declaró en una entrevista televisiva que  “para todas las intenciones y propósitos soy una mujer. La gente me ve diferente, me ven como un macho. Pero mi corazón, mi alma, todo lo que hago y mi lado femenino son parte de quién soy, eso es parte de mí”. Su valentía fue reconocida por sus tres ex esposas: Kris Jenner, Linda Thompson y Chrystie Crownover. 

¿Quedarte o irte?

Sanjurjo expresó que es normal, ante una confesión relacionada con la identidad sexual por parte de la  pareja, sentir mucha confusión, sorpresa y engaño. Al mismo tiempo, mencionó que también puede experimentarse inseguridad, dolor y tristeza ante el engaño, y la confianza en quien ha sido su pareja puede verse lacerada.

Como cada pareja es distinta, la sicóloga enfatizó que es importante ver los casos de manera individual. No obstante, ofreció recomendaciones para enfrentar dos posibles escenarios: cuando la pareja decide continuar su relación a pesar de la lucha sexual interna de uno de sus componentes, y cuando uno de los dos o ambos deciden terminar.  

“Si ambas personas deciden trabajar la relación, y hay voluntad de perseverar, con mucho trabajo se podría perseverar (la relación), siempre y cuando haya un sentimiento genuino”, recalcó. 

Sanjurjo resaltó que algunas personas que tienen conflictos con su identidad sexual permanecen en relaciones heterosexuales por sus valores o creencias y deciden trabajar sobre esas bases para conservar su relación. 

“De una forma u otra, ellos deciden voluntariamente darle prioridad a sus valores, y lo hacen como una decisión bien consciente. Para ellos no es algo fácil, y hay muchos hombres y muchas mujeres que están viviendo ese tipo de vida conscientes de que tienen esa orientación que quizás nunca se vaya, y libremente desean dejarse llevar por estos valores, por eso que es importante para ellos”, sostuvo.

Por otro lado, indicó que aunque la intimidad sexual puede ser un reto, el diálogo y un profesional puede ayudarlos en el proceso de reconstruir esa parte de la relación, así como aspectos emocionales con que se identifiquen como pareja.

“Estas relaciones muchas veces se fundamentan más allá de una intimidad sexual en una intimidad emocional. Esa conexión emocional podría llevarlos paulatinamente a disfrutar desde otra forma la relación sexual, y así la cultivan. Quizás él o ella no va a sentir esa atracción, ese fuego o esa pasión que sentiría por alguien del mismo sexo – en el caso de un homosexual – pero él quiere trabajar la relación porque así se está moviendo a lo que es importante para él, como lo son esos valores”, añadió. 

De otro modo, si quien enfrenta una lucha con su identidad sexual o de género resuelve terminar la relación, subrayó, es importante que la otra parte respete esa decisión y trabaje en su proceso de duelo y en el coraje, y confusión que podría experimentar ante ese escenario. 

En estos casos, destacó, lo recomendable es hacer una autoevaluación de la relación. De esa introspección se debe identificar el aprendizaje, tanto los aspectos buenos, como los malos de esa relación. 

“Es importante que esa persona crezca, que este proceso no pase desapercibido, que asuma responsabilidad por lo que le corresponde únicamente, y que permita que la otra persona asuma responsabilidad por lo que le corresponde”, recalcó.

Si una mujer viviera una situación similar a las experimentadas por las tres ex esposas de Jenner, es importante que entienda que “el issue de la identidad sexual del otro individuo es algo bien personal de él, que tiene múltiples raíces, y no sería justo para ella que se achaque eso a sí misma”. 

Del mismo modo, subrayó, que como parte del proceso de evaluación de la relación ella debe identificar sus virtudes y entender que si no funcionó esa vez, no significa que ella no tenga méritos que puedan ser apreciados en el futuro por otra persona. 

Comenzar de nuevo

Sanjurjo consideró que luego de sentirse defraudada por su pareja tras una confesión relacionada con su identidad sexual es normal que una persona que le exija a una futura pareja mayor honestidad y confianza. 

“Uno de los retos más grandes es volver a confiar en el otro. Tiene que sanar sus heridas. Buscar ayuda sicológica para que pueda sanar las heridas que surgieron de esta relación, que ella pueda dividir un evento del otro, que no generalice, que logre entender el inicio de su relación, el progreso de su relación y el final de su relación. Que se dé la oportunidad de entender esa relación que terminó para que se enfoque en esa nueva relación  y no  generalice”, abundó.