Twitter ha sido algo caótico desde que el multimillonario duelo de Tesla, Elon Musk, asumió las riendas, recortó el personal a la mitad, cambió drásticamente el sistema de verificación de la plataforma, se peleó con usuarios y reconoció que se podrían cometer “tonterías” en su reforma de una de las redes sociales más prominentes en el mundo.

El jueves, en medio de un éxodo de los altos ejecutivos responsables por privacidad de datos, ciberseguridad y cumplimiento de regulaciones, Musk les advirtió a los empleados restantes que la supervivencia de Twitter estaría en duda si no encuentra una manera de conseguir al menos la mitad de sus ingresos de sus subscriptores.

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Aunque no está claro si el drama está provocando la huida de muchos usuarios — de hecho, contemplar el caos desde la primera fila podría resultar entretenido para algunos — sitios menos conocidos, como Mastodon, e incluso Tumblr están emergiendo ahora como alternativas nuevas (o renovadas).

Con el nombre de un paquidermo extinto parecido a un elefante, Mastodon (mastodonte) ha emergido como favorito entre aquellos curiosos dispuestos a explorar opciones al pájaro azul. Tiene algunas similitudes con Twitter, pero también algunas diferencias grandes, y no solamente que su versión de los tuits es llamada “toots” (bocinazo).

El portal de Mastodon no cuenta con publicidad y se sostiene mediante donaciones. subvenciones y otros medios.
El portal de Mastodon no cuenta con publicidad y se sostiene mediante donaciones. subvenciones y otros medios. (The Associated Press)

Mastodon es una red social descentralizada. Eso significa que no es propiedad de una compañía o un multimillonario. En lugar de ello, está formada por una red de servidores, cada uno manejado independientemente, pero interconectado para que las personas en servidores diferentes puedan comunicarse entre sí. No hay anuncios publicitarios, pues Mastodon es financiado por donaciones, subvenciones y otros medios.

El flujo en Mastodon es cronológico, a diferencia de los de Facebook, Instagram, TikTok o Twitter, que usan algoritmos para lograr que la gente se pase el mayor tiempo posible en sus sitios.

“Presentamos una versión de redes sociales que no puede ser comprada por un multimillonario y buscamos crear ua plataforma global más resistente sin incentivos de ganancias”, dice el portal de Mastodon.

Otras alternativas son Clubhouse, una app basada en audio que se popularizó durante la pandemia y que deja a las personas hablar entre ellas sobre temas de su interés; Substack y Medium, mejores para mensajes más largos, información general y boletines informativos; y Tumblr, que parece estar experimentando un renacer.