ORLANDO. El condado de Osceola, donde se concentra la principal población de puertorriqueños en la Florida Central aprobó un acuerdo para permitir tres dispensarios de marihuana medicinal, aunque determinó prohibir más establecimientos similares.

Y es que, como en otras jurisdicciones incluyendo a Puerto Rico, la discusión sobre este tema no ha estado ajena a choques y controversias. 

En el 2016, los electores de este condado votaron a favor de una enmienda constitucional para permitir la venta de marihuana medicinal. 

Más del 70% del electorado votó a favor, explicó Viviana Janer, comisionada del  Distrito 2 del condado de Osceola, quien es puertorriqueña.

Cuando esto ocurrió, la legislatura estatal en Tallahassee intervino para estipular que Osceola no podía reglamentar esos dispensarios ni decidir cuántos podían abrir.

En ese momento, la empresa Green Solution  había tramitado los permisos para el establecimiento de tres dispensarios en Osceola.

Entonces, Osceola -al ver que perdía poder- aprobó una medida para para prohibir nuevos establecimientos.

Asimismo, las ciudades de Kissimmee y Saint Cloud vedaron estos dispensarios dentro de los límites de sus ciudades, explicó Janer. 

Los que se establezcan en Osceola tendrán que estar fuera de esas dos jurisdicciones.

“Decidimos prohibirlos pues con la intervención de la legislatura de Tallahassee, que fue una píldora venenosa, no sabíamos cuántos dispensarios iban a venir ni si los pondrían cerca de escuelas o tendrían rótulos de neón con hojas de marihuana. Esa no es la imagen que queremos para el condado. Por eso, luego de esos tres dispensarios que ya tenían permiso, prohibimos nuevos, pero eso podría cambiar si en Tallahassee cambian de opinión”, comentó Janer.

La funcionaria dijo que la decisión de la legislatura estatal de Florida podría ser porque sus integrantes son personas republicanas conservadoras. 

“Ellos se han opuesto a esta medicina, pues es una medicina que solo se puede conseguir con receta y solo se vende en forma de píldora o en líquido. No es para fumar”, opinó.

Janer indicó que con esta prohibición Osceola retiene el poder de decidir la cantidad de dispensarios y el lugar donde pueden ubicarse.

“Parece probable que la aceptación pública de la marihuana continuará aumentando. Ya se habla de una enmienda de marihuana recreacional en la papeleta estatal de 2020. Pero debido a las acciones prácticas de su comisión del condado aquí en Osceola tendremos un enfoque prudente y regulado para permitir dispensarios de marihuana medicinal”, planteó.

Janer se convirtió en el 2014 en la primera hispana comisionada del condado de Osceola, y la segunda en la historia de su junta, cuerpo que constituye la forma de gobierno más antigua de América.