Los empleados públicos y los líderes obreros reaccionaron decepcionados hoy, jueves, luego de que el Senado y la Cámara de Representantes aprobaran la legislación que reformará el Sistema de Retiro.

Entre sollozos, Ivelisse Vélez, quien tiene 50 años y lleva 29 años trabajando en el Departamento de la Familia, expresó su insatisfacción con la aprobación del Proyecto de la Cámara 888.

“Yo cumplo 29 años de servicio el 1 de agosto. ¿Tú te crees que eso es justo para nosotros? Eso no es justo. Por lo menos, yo le daba cinco años más, que eran 34 años de servicio, pero ¿tú sabes lo que son 12 años, para cumplir 62 años?”, cuestionaba Vélez.

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“Hay otras medidas que se pueden hacer. Nosotros les hemos dado a ellos todas las propuestas que hay, a través de Servidores Públicos Unidos… Que ellos no quieran escucharnos es otro cantar”, exclamaba la mujer, madre de siete niñas.

Tal era el estado de alteración de Vélez, que al hablar comenzó a sangrar por el labio inferior debido a que se lastimó con sus “braces”, y no se había percatado.

“Esto no es fácil”, decía sollozando.

Igual de desilusionada se expresó la técnica de patología forense Lissette Reyes, quien además resaltó la crisis que la medida podría provocar en agencias como el Instituto de Ciencias Forenses (ICF), debido al gran número de personas que se acogerán al retiro temprano.

“Esto que se acaba de aprobar hoy, trae una gran repercusión al sistema de Justicia y los tribunales porque nosotros somos peritos de difícil reclutamiento, y hay muchas personas que van a acogerse al retiro temprano, y los peritos que habemos allí, no damos a basto. El ICF puede colapsar. Esto es muy serio”, advirtió.

“No queremos que ocurra lo que sucedió anteriormente con el ataponamiento de cadáveres. Nosotros vamos a confrontar una crisis”, agregó.

A las afueras del Capitolio, el ánimo de los trabajadores contrastaba con la música de Rubén Blades que se escuchaba por el altavoz de una guagua de sonido.

Rostros llorosos, apesadumbrados y de incertidumbre se percibían en la plazoleta ubicada en el área norte.

 La líder magisterial Eva Ayala Reyes indicó que, aunque no los tomó por sorpresa la aprobación de la medida, “abrazábamos la esperanza de que ocurriera lo contrario”.

“No nos sorprende del Partido Popular Democrático y el Partido Nuevo Progresista porque ellos siempre se han caracterizado por atentar en contra de la clase obrera. Con esta reforma, de lo que podemos estar seguros es de que la clase obrera se va a seguir empobreciendo”, sentenció la portavoz del sindicato Educamos, prácticamente sin voz, luego de gritar en repetidas ocasiones desde las gradas del hemiciclo senatorial,

Ayala Reyes señaló, por otro lado, que las reacciones de ira reflejan la indignación de las personas que pusieron las esperanza en el gobierno nuevo.

Por su parte, el líder sindical Luis Pedraza Leduc indicó que la “frustración” que se vive hoy en el sector público hay que superarla “haciendo propuestas y organizándonos mejor”.

“Los sindicatos tenemos que mejorar nuestro funcionamiento representando a los trabajadores. Ahora tenemos que dar a conocer mucho mejor el impacto de esta legislación en los trabajadores, en el servicio y en los que se quedan, en los que se van”, reconoció.

Desde temprano en la mañana, cientos de empleados y líderes de organizaciones sindicales advirtieron que no estaban satisfechos con las enmiendas que introdujo el Senado durante el día.

Las modificaciones se las habría anunciado el propio presidente del Senado, Eduardo Bhatia. "Se le agradece que tratara de explicarnos, pero no estamos de acuerdo. No nos han dado la información actuarial, ni nadie sabe cuál va a ser el impacto que va a tener", sostuvo José Malara, coordinador de la sindical UAW, uno de varios líderes obreros que se reunieron con Bhatia en el Capitolio a menos de dos horas de que iniciara la sesión.

El propio Bhatia les dijo que las modificaciones hechas al proyecto que originalmente envió el gobernador Alejandro García Padilla aumentó el costo anual del Retiro de $100 millones a $300 millones.

"Este proyecto no es mío. Lo recibí, lo atendí. Lo he tratado de modificar de la forma más dramática posible, dentro de lo que el espacio lo permite", dijo Bhatia. "Si no hago nada, si no apruebo esta ley, si se cabildea a los legisladores para que no se haga nada y se derrota esta ley, quiero que sepan y no estoy mintiendo: en seis meses se cierra el Sistema de Retiro y se acabó", advirtió.

"Quizás es un sistema más reducido, pero nadie va a dejar de tener retiro. No es la pensión de 75%. Eso ya no puede existir porque ha llevado al sistema a la quiebra. El 65% también lo llevó a la quiebra", agregó. "No van a estar de acuerdo y yo no estoy de acuerdo, pero (el proyecto) está de acuerdo con la realidad de este momento".