La secretaria del Departamento de la Familia (DF), Ciení Rodríguez Troche, informó que separó de todos los casos a su cargo a la trabajadora social que atendió referidos relacionados a la familia de Kailanys Soto Roqué, la infante de un año de edad que fue abusada, maltratada y asesinada por la pareja de su madre en hechos ocurridos en Aibonito.

Según precisó la funcionaria en una conferencia de prensa, la medida es una cautelar, y “no adjudica responsabilidad alguna” contra la trabajadora social, a quien no identificó por su nombre al asegurar que ha recibido “amenazas”.

Tras el asesinato de la menor, el DF realiza una pesquisa administrativa sobre el manejo del caso luego de que trascendieran denuncias de vecinos del Proyecto Villa de la Rosa en Aibonito, donde residía la niña junto a su madre y dos hermanitos, que apuntan a que emitieron referidos a la agencia por maltrato, pero estos no se atendieron.

Según precisó Rodríguez Troche, el DF recibió cuatro referidos relacionados al entorno de la bebé, todos antes de febrero de 2023. Entonces, se alegó peligro a la vida de los menores por un ambiente de violencia de género contra la madre de estos, Yaniré Roqué Lupiáñez.

“Todos los referidos eran relacionados a la pareja anterior de mamá”, dijo Rodríguez Troche al tiempo que apuntó a que no existen referidos relacionados a Jovanie Aponte Ríos, pareja actual de Roqué Lupiáñez, y quien ayer fue acusado de asesinato, agresión sexual y maltrato por la muerte de la pequeña.

La funcionaria aseguró que tras los referidos, la trabajadora social del caso, visitó el hogar de Roqué Lupiáñez y los menores en 13 ocasiones, siendo la última visita el pasado mes de noviembre, cuando le presentaron a Aponte Ríos como parte del nucleo familiar y la nueva pareja de la madre de la menor.

Las visitas eran de seguimiento porque la situación con la expareja de la madre ya se había solucionado a través de una orden de protección. El hombre, a quien tampoco se identificó, además cumple una condena por violencia doméstica contra Roqué.

El DF habilitó el correo confidencias@familias.pr.gov para que vecinos de la familia que alegaron haber realizado referidos sin que se atendieran, sometan información sobre a dónde y con quién se comunicaron. Los mensajes recibidos serán parte de la investigación administrativa que hace la agencia.

“Este caso se va a investigar hasta las últimas consecuencias”, dijo finalmente la secretaria.

En horas de la mañana del lunes la bebita –que cumplió su primer año de vida en noviembre pasado- fue llevada al Hospital Menonita en Aibonito con varios golpes. La niña estaba bajo el cuidado de la pareja de su madre, quien alegó que se cayó de la cama.

No obstante, según confirmó la teniente Blanca Pérez, del Centro de Investigaciones Criminales de Aibonito, médicos que atendieron a la pequeña confirmaron que los golpes que presentaba no eran compatibles con una caída.

Según precisó, la menor presentaba golpes en la cabeza, sangrado en la oreja y deformación en sus partes íntimas, lo que es compatible con una agresión sexual.

Posteriormente, Aponte Ríos admitió, según la Policía, haber abusado sexualmente de la menor. Contra este, y la madre de la niña, se radicaron cargos con una fianza de $6 millones y $4 millones, respectivamente. Al no prestarlas, ambos fueron ingresados a prisión.