La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés) informó hoy que asignó $136.5 millones para reparar 157 escuelas con columnas cortas, la condición estructural que es vulnerable a colapsos durante terremotos.

La millonaria asignación se realizó bajo la sección 406 de Mitigación de Riesgos, para llevar a cabo obras que combinan el refuerzo de la estructura escolar y los muros de corte a fin de reducir el impacto en caso de un evento sísmico.

“La reconstrucción de las escuelas afectadas por los terremotos del pasado año es una de nuestras prioridades. Semanalmente, se realizan reuniones para completar la formulación de los proyectos y ya solo faltan 59 proyectos de escuelas por recibir obligaciones del Programa de Asistencia Pública de FEMA”, precisó el director ejecutivo de la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3, en inglés), Manuel Laboy Rivera.

“Al mismo tiempo, hemos emitido aproximadamente $680,000 en desembolsos para la fase de arquitectura e ingeniería de 21 proyectos de reconstrucción en planteles que ubican en la zona sur. El compromiso del gobernador Pedro Pierluisi es claro y continuamos trabajando en equipo para que estas obras se desarrollen a favor de la seguridad de nuestras comunidades escolares”, agregó en declaraciones escritas.

Por otro lado, se explicó que el Departamento de Educación cuenta con la adjudicación de sobre $108 millones de FEMA para 99 proyectos de obra permanente en los municipios afectados por los terremotos del año pasado.

Entre las escuelas del sistema público con obligaciones millonarias se encuentra la Escuela Elemental Blanca Malaret de Sabana Grande con $1.9 millones. “Nuestra plantilla es de 558 estudiantes y las reparaciones están a punto de culminarse”, confirmó el director escolar Miguel Ramírez Morales. El espacio también sirve de refugio, pues cuenta con placas solares y un generador.

De igual manera, las escuelas Bernardo González Colón y Dr. Efraín González Tejera en Utuado sirven como refugios en caso de emergencias. Ambas recibieron asignaciones de $1.8 millones y $1.4 millones, respectivamente. La primera, que tiene una matrícula de 346 estudiantes, puede refugiar a unas 100 personas en caso de emergencia, mientras que la segunda, con una matrícula de 137 alumnos, puede acomodar a unas 60 personas.

“La educación es un pilar de la sociedad. Que en FEMA podamos ayudar a que la enseñanza se imparta en escuelas seguras y resilientes es una gran satisfacción. Sin duda, es parte vital del compromiso que tenemos con la recuperación de Puerto Rico, no solo de (huracán) María, sino de los terremotos que tanto daño causaron”, sostuvo por su parte el coordinador federal de recuperación por desastres de Puerto Rico, José Baquero.