ATLANTA. Los puertorriqueños que deseen canjear sus licencias de conducir por una de Georgia ya no tendrán que someterse a pruebas o aceptar requerimientos adicionales no impuestos a los demás ciudadanos estadounidenses, según un acuerdo que puso fin a un litigio judicial.

El Departamento de Licencias de Conducir de Georgia ya no exige a solicitantes realizar una prueba de manejo o escrita para transferir una licencia válida siempre y cuando el aplicante tenga 18 años y cumpla con las condiciones de residencia y documentos de Georgia, estipula el pacto. La agencia además eliminará un cuestionario que usaba para verificar que el solicitante era realmente puertorriqueño.

La demanda fue presentada en julio pasado por Kenneth Caban González, quien nació en Puerto Rico y solicitó una licencia en Georgia tras mudarse allí en el 2017. Denunciaba que el estado trataba distinto a los puertorriqueños que a los demás estadounidenses ya que les obligaba a realizar pruebas, les confiscaba sus documentos para cerciorarse que no eran falsos y les interrogaba en cuanto a detalles sobre la isla.

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La demanda fue presentada por expertos legales del Southern Center for Human Rights y de la asociación LatinoJustice PRLDEF.

“Apreciamos los esfuerzos del Departamento de Licencias para poner fin a políticas discriminatorias que trataban a los puertorriqueños como ciudadanos de segunda clase. Confiamos en que estas reformas darán alivio y esperanza a la creciente comunidad de puertorriqueños en Georgia”, dijo en un comunicado Atteeyah Hollie, abogada del Southern Center.

Caban González solicitó una licencia de conducir en octubre del 2017. El departamento se quedó con su licencia original puertorriqueña, con el original de su partida de nacimiento y su tarjeta de seguridad social, diciéndole que le avisaría cuándo podía ir a recogerlos.

Un investigador remitió los documentos a su supervisor, comentando que no parecían ser legítimos. Cuando Caban González fue a recoger los papeles en noviembre del 2017, lo acusaron de dar documentos falsos y fue arrestado.

El personal de la agencia se enteró dos semanas después de que el proceso de verificación que estaba usando para documentos puertorriqueños era obsoleto, y las autoridades federales confirmaron en el verano del 2018 que los documentos de Caban González eran legítimos, según un reporte de la Oficina de Investigaciones de Georgia. Aun así, no se desestimaron los cargos sino hasta marzo pasado.

La investigación se inició a raíz de la demanda de Caban González, y el Departamento de Licencias despidió a un gerente y le redujo el cargo a otro a raíz de los resultados, dijo en diciembre la agencia mediante un comunicado.