La continua extracción de millones de galones de agua diarios del embalse Cerrillos por parte de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) para suplir la demanda en el servicio que requiere gran parte de Ponce, podría poner en peligro la vida útil del lago en cuestión de meses.

Esto debido a la escasa precipitación en la zona, ocasionado por el calentamiento global, además de que el uso prolongado del recurso no estuvo contemplado en el diseño original del proyecto a cargo del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos (USACE, por sus siglas en inglés), que basó su estudio en un análisis hidrográfico de la zona en vías de garantizar su rendimiento seguro.

Relacionadas

De acuerdo con el ingeniero Pablo Vázquez Ruiz, exdirector de USACE en Puerto Rico e Islas Vírgenes, quien estuvo a cargo de la operación de esta represa durante cinco años, “la extracción de Cerrillos está por encima de su rendimiento seguro y por eso ves que desciende a esos niveles y la llevan a un punto crítico y ¿qué va a pasar? El año que viene la represa no va a poder suplir”.

“El problema de Cerrillos ha sido básicamente que cuando se diseñó en su origen, estamos hablando de la época de los 70, 80, se hace a base de un análisis hidrográfico de la cuenca, que eso surge del nivel de precipitación que haya pues nos dice cuánto es que se puede extraer de la represa de forma segura, de forma sostenida y el diseño de la represa en su momento contemplaba 22 millones de galones (de agua) diarios”, señaló el ingeniero que también estuvo involucrado en la construcción del embalse.

“Eso significa que mientras hubiese esa cantidad de precipitación, la represa podía sostener 22 millones (de galones de agua diarios) y para el siguiente ciclo, el siguiente año, estar recuperada y poder seguir supliendo esa misma magnitud. Pero ese parámetro de diseño cambia porque depende de la precipitación, y, si confrontamos periodos que pueden durar décadas en que la precipitación disminuye pues el rendimiento del embalse también disminuye y si uno le va a estar sacando al nivel para la cual estaba diseñada e inclusive por encima, pues el embalse no va a poder recuperarse”, advirtió.

Asimismo, señaló que la represa ha tenido diversos ciclos de extracción desde la segunda mitad de los años 90, cada vez que el embalse Toa Vaca en Villalba entraba en crisis.

Sin embargo, no es lo mismo que sucede desde el 2008 cuando el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) -que es el dueño de la instalación- concedió un contrato a la AAA para que sacara aguas crudas del embalse.

“La represa la están utilizando única y exclusivamente cuando la represa Toa Vaca entra en crisis y ¿cuál es la razón? Simplemente económica. Sacar agua de Cerrillos le cuesta a la AAA y, mientras ellos no tengan la necesidad de sacarle agua a Cerrillos no le sacan. Entonces, esperan a que la represa Toa Vaca entre en crisis para entonces ir a Cerrillos. Ese tipo de manejo de crisis es lo que nos tiene donde estamos”, manifestó.

Explicó que desde 1997, USACE tuvo varias reuniones con el Municipio de Ponce y la AAA para tratar de establecer un sistema que permitiera el uso simultáneo de las represas Cerrillos y Toa Vaca.

Cabe destacar que, actualmente, el embalse Toa Vaca suple a los abonados de Villalba, Coamo y Juana Díaz, y, según la directora regional en el sur de la AAA, Damaris Santini, Cerrillos “es la fuente principal de aguas crudas para la planta de filtros Ponce Nueva, Ponce Vieja y Coto Laurel”.

“¿Por qué no pueden operar simultáneamente? Porque el nivel de superficie de ambos embalses es distinto; Cerrillos es mucho más alto que Toa Vaca, por lo tanto, si abres una válvula donde están conectadas esas dos líneas, tienes un problema con las presiones. Es un asunto técnico que siempre se discutió, pero se podía resolver con instalar una válvula de regular presiones, que no sería el único sitio que se hace y eso hubiese permitido un uso simultáneo de ambos embalses para que así, ninguno entrara en crisis, o sea, no se llevara al punto de tenerlo en una crisis para entonces ir al otro”, argumentó el otrora expresidente del Colegio de Ingenieros y Agrimensores de Puerto Rico.

De otra parte, destacó que la construcción de la represa Portugués, que concluyó en el 2014, era en parte para liberar al embalse Toa Vaca, ya al unir Cerrillos con Portugués podían suplir la demanda de agua en la Perla del Sur por las próximas décadas.

Sin embargo, el Gobierno de Puerto Rico optó por no invertir pues el rediseño del proyecto resultó más costoso.

“El diseño de Cerrillos era de 22 millones (de galones de agua diarios) y el de Portugués, era de 11 millones. Estamos hablando de 33 millones de galones, que prácticamente Ponce iba a tener agua por décadas y décadas, pero, cuando nosotros inicialmente diseñamos el proyecto, se diseñó un tipo de represa cuando no se logró adjudicar en el 2000 y se tuvo que rediseñar”, explicó.

“Entonces, el diseño resultó más costoso y la parte que le iba a corresponder pagar al gobierno de Puerto Rico, iba a ser más costoso si se le suplía agua y entonces, el gobierno de Puerto Rico optó por no invertir, por no sacar el dinero y entonces, con esa decisión no se tenía y no se tendrá el beneficio de sacarle agua a la represa Portugués, que de ahí podían salir 11 millones de galones de agua diarios”, recordó.

Reiteró que la capacidad de rendimiento del embalse Cerrillos no puede sustituir a Toa Vaca, que, por diseño “es más del doble que Cerrillos en términos de la capacidad de suplido, por lo cual, su rendimiento es mucho mayor”.

“A Toa Vaca se le extrae una cantidad, pero, cuando se le extrae esa misma cantidad a Cerrillos para sustituir la demanda, obviamente está muy por encima del rendimiento seguro. Si le están sacando agua constantemente va a llegar a un nivel crítico que la represa no va a poder recuperarse, bajo condiciones normales”, expuso.

Por otra parte, resaltó que toda esta situación es producto del manejo regional de la AAA.

“Esa es la realidad, porque si tienes dos embalses y puedes ponerlos a trabajar simultáneamente, se supone que le estás dando a ambos la capacidad para poder recuperarse. Pero si llevas un embalse a un extremo y luego vas al otro embalse y lo usas también al extremo, entonces lo que estás haciendo un daño a ambos embalses porque no les permites que se puedan recuperar porque para el siguiente ciclo no están listos para suplirte la misma cantidad de agua para el mismo tiempo”, acotó.

“Ese es el problema… que la AAA dice que (Cerrillos) no está en un estado crítico por lo cual se sienten con la libertad de continuar extrayendo agua. Cerrillos no puede sustituir a Toa Vaca… el daño mayor se le hace a Cerrillos”, insistió.

Finalmente, el exdirector de la USACE en Puerto Rico e Islas Vírgenes dijo que, de no haber una precipitación significativa, llegará el punto en que la AAA no pueda extraer más agua de ese embalse.

“Es bien difícil de predecir porque ahora mismo no sé cuál es la extracción que le están haciendo al lago, pero si no hay precipitación va a llegar al punto, quizás en unos meses, de que no se puede sacar más. Y entonces ¿qué pasa? vuelven a Toa Vaca, pero dejaron a Cerrillos seco. Si no llueve en el resto de año para esta área, el año que viene no hay Cerrillos para suplir agua porque lo llevaron hasta secarlo y no hay más alternativas”, concluyó.