La presidenta de la Asociación de Dueños de Centros de Cuido Prolongado, Juanita Aponte Morales, reveló que los administradores de hogares de ancianos están preocupados ante la insistencia de políticos que constantemente recurren a estas facilidades con la intención de procurar el voto adelantado de las personas encamadas sin tomar en consideración la orden ejecutiva que prohíbe las visitas a estos lugares como medida cautelar para prevenir contagios de COVID-19 en la vulnerable población de adultos mayores.

Se estima que unas 25,000 a 30,000 personas viven en los 850 centros de cuidado de larga duración de envejecientes que tienen el licenciamiento del Departamento de la Familia.

“Se pasan llamando para buscar el voto adelantado de los electores encamados. Me tienen loca. Ejercer el voto es un derecho, pero la seguridad de los residentes en medio de esta pandemia va por encima de eso y es nuestra gran preocupación… me han dicho que por ley puedo estar coartando los derechos a votar de los residentes. Pero, ¿cómo voy a dejar entrar a personas de un partido político cuando por cuatro meses no se lo hemos permitido a los familiares de las personas? Si la orden ejecutiva dice que no hay visitas para proteger a estas personas que son tan vulnerables pues no hay visitas. Punto”, expresó Aponte Morales.

El proceso de cómo votarían en estas elecciones los envejecientes que viven en hogares de cuidado prolongado cobra particular relevancia pues ese grupo poblacional es considerado como uno de los de mayor riesgo de enfermar con el COVID-19, sufrir serias complicaciones o, incluso, morir. El reclamo de Aponte Morales surge precisamente este lunes cuando se reportó el primer caso positivo al novel coronavirus en un centro de cuido de envejecientes de Carolina.

¿Está preparada ante la posibilidad de que el asunto llegue a los tribunales?, le preguntó este diario a la portavoz de la organización que tiene más de 300 dueños de hogares como miembros.

“Yo me voy hasta las últimas consecuencias”, sentenció.

“La intención puede ser buena, pero lo siento. Si no hemos dejado a los hijos de estas personas residentes visitarlos, cómo voy a dejar a entrar a una persona que ni siquiera sé dónde ha estado o a qué se ha expuesto. Lo lamento, pero en esta temporada todos los funcionarios políticos deben ateponer su deseo de prevalecer o salir electo con la seguridad y bienestar de nuestros adultos mayores. Si se tienen que atrasar las cosas que se atrasen porque peor y mayor riesgo es exponer a estos residentes… por una elección se les puede ir la vida”, sostuvo.

Agregó, además, que de los 30,000 posibles constituyentes muchos “no están cognitivamente alerta” para ejercer el derecho al voto. “Hay que hacer cernimientos y que un médico certifique la habilidad o capacidad de ese residente para tomar una decisión tan importante como lo es elegir a las personas que llevarán las riendas del país porque lo cierto es que en nuestras instituciones hay muchas personas con deterioro cognitivo”, puntualizó.

Recientemente, el presidente del Partido Popular Democrático (PPD), Aníbal José Torres, y el comisionado electoral del partido, Lind Merle Feliciano, alertaron, sobre una presunta intención de un sector del Partido Nuevo Progresista (PNP) para intervenir con el voto adelantado en su modalidad de voto encamado o domicilio.

Tanto Torres como Merle adujeron que un sector novoprogresista está contactando a administradores o propietarios de casas de cuido de personas de edad avanzada o con condiciones de salud, para que soliciten el voto adelantado a nombre de sus residentes. Estos actos, insistieron, pudieran violentar el Código Electoral y la legislación que acoge a las personas de edad avanzada, de conformidad con la Carta de Derechos que les protege.

“Tenemos información de que de la misma forma que lo hicieron en el 2012 y 2016, nuevamente, intentan un esquema ilegal con el Voto Encamado. El pasado cuatrienio tuvimos que acudir a los tribunales para impugnar un operativo ilegal donde varios médicos certificaron miles de electores como encamados para utilizar el voto a domicilio”, explicaba el escrito.

Ambos funcionarios recordaron que en las elecciones del 2012, el PPD tuvo que denunciar cómo en Río Grande se trató de alterar los procedimientos del voto adelantado (categoría votos encamados). Administradores de hogares y casas de alojamientos tramitaban la solicitud del voto encamado, sin tan siquiera ser requerido por los electores en el Referéndum del 2012. El caso llegó a los Tribunales y la CEE tuvo que transar el mismo para evitar un fraude por una autorización de cientos de “alegadas solicitudes” de votos encamados, tramitándose por correo sin el conocimiento de esos mismos electors.

Primera Hora se comunicó con el comisionado electoral del PPD, Lind O Merle Feliciano, para que hablara sobre este asunto, pero al momento no se había recibido respuesta.

Por su parte, la comisionada electoral del PNP, María D. “Lolín” Santaigo, determinó a este diario que el tema de cómo se llevará a cabo el voto de las personas encamadas y aquellas que viven en égidas o centros de cuidos prolongando no está del todo decidido. No obstante, afirmó que se tomarían todas las medidas necesarias para garantiza un balance entre la seguridad y el ejercicio democrático del voto.

“Nosotros hemos estado desde el día uno buscando alternativas para que los electores estén seguros al momento de hacer el voto”, afirmó Santiago. “Al momento, hay una moción de una de las campañas que está ante la comisión de primarias, que la estamos atendiendo, y la vamos a decidir mañana (martes)”.

“Con relación a las visitas del voto encamado, estamos esperando al 15 de julio que es la fecha límite para que el voto adelantado sea solicitado, y dependiendo de la cantidad y lugares que se estén solicitando, y ahí sabremos cuántos son en centros de cuido, entonces estaremos trabajando los protocolos que ya hemos discutido, para poner en práctica”, explicó la comisionada.

“Hay varias alternativas y estaremos decidiendo, como equipo de trabajo, cuál vamos a usar para garantizar la seguridad tanto de funcionarios como de electores”, agregó.

Santiago reiteró que lo que buscan, en estos momentos que plantean un escenario diferente por causa de la pandemia del COVID-19, es un balance entre seguridad y permitir el ejercicio de votar.

“En sentido general, creo que hay un sentido de responsabilidad cívica, de cooperar. Lo ves en las filas en las tiendas, en supermercados. En su gran mayoría la gente se está cuidando. Siempre hay alguno que otro que no lo hace, pero en general la gente se está cuidando. Y no debería ser diferente en las elecciones”, afirmó Santiago.

Sostuvo que, para las votaciones, “vamos a poner marcas en los pasillos de las escuelas, con la cantidad de personas que quepan, y después de eso le damos un turno para que siga la fila, pero con distanciamiento social. Y usamos los patios, las canchas, lo que sea necesario, para proveer seguridad”.

Agregó que el horario de votación para las primarias se mantiene de 8:00 a.m. a 4:00 p.m.

“Hemos estado trabajando duro para garantizar que todo fluya de la mejor manera posible. Y cualquier cosa que necesite ajustarse para las elecciones generales pues lo hacemos”, reiteró Santiago.

Primera Hora intentó conseguir al presidente de la CEE, Juan Ernesto Dávila, para que abordara el particular de cómo se trabajaría el voto de encamados y personas en centros de cuido, pero no estuvo disponible, según explicaron porque tenía su agenda cargada de compromisos.

Para las primarias del 9 de agosto, se amplío la categoría del voto adelantado para que personas mayores de 60 años de edad o con condiciones específicas de salud puedan acogerse a éste. Las personas que deseen solicitar el voto adelantado tienen hasta el 15 de julio para hacerlo.

Osman Pérez Méndez colaboró en esta historia.