LONDRES. Una cocker spaniel nacida con seis patas que fue encontrada abandonada en el estacionamiento de un supermercado, es ahora como los demás perros después de que le extirparan quirúrgicamente las extremidades adicionales.

Ariel, que recibió el nombre del personaje de “La Sirenita” porque el apéndice adicional con dos patas en el extremo parecía una aleta, corrió por la hierba el sábado mientras se adaptaba a la vida a cuatro patas.

“Lo está haciendo estupendamente”, dijo Vicki Black, directora del Hospital de Referencia de Pequeños Animales Langford Vets, donde fue operada el jueves.

La perra, que tenía múltiples defectos de nacimiento, fue encontrada en el centro de Pembroke, Gales, en septiembre. Greenacres Rescue la acogió y recaudó fondos para su operación.

Black dijo que el hospital, que forma parte de la Universidad de Bristol, nunca había visto un perro de seis patas ni había realizado una operación de este tipo.

“Ariel era una perrita complicada”, dijo Black. “Somos un centro comprometido con el aprendizaje continuo y estamos orgullosos de innovar y tratar a mascotas como Ariel”.

Las patas adicionales se extendían desde el cuarto trasero derecho y parecían no servir para nada, colgando junto a su cola que se movía, ya que caminaba un poco torpe en un vídeo grabado antes de la operación.

El sábado, cuando le dieron el alta, salió al césped del hospital con la determinación de un perro pajarero, con la nariz pegada al suelo y tirando de la correa.