La alcaldesa de Canóvanas, Lornna Soto Villanueva, anunció hoy varias de las medidas que se tomarán para reforzar la vigilancia y restaurar la tranquilidad en su municipio a raíz de los recientes incidentes de violencia reportados desde principios de mes en las comunidades Monte Verde y Las Villas del barrio San Isidro, por lo que solicitó apoyo de las agencias gubernamentales y federales para establecer un plan integral con el fin atajar el problema lo más pronto posible.

La gota que colmó la copa fue el tiroteo ocurrido durante la tarde del martes hacia una estructura donde está ubicado el negocio La Esquina y una residencia familiar en el segundo nivel, localizada en la calle 20 del sector Monte Verde del barrio San Isidro, en Canóvanas. Se investiga si la balacera guarda o no relación con el crimen de un joven durante una fiesta de cumpleaños el pasado 2 de junio.

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Los hechos ocurrieron a eso de las 4:07 p.m. cuando frente al negocio se estacionaron cuatro vehículos de los que se bajaron de seis a ocho gatilleros y abrieron fuego indiscriminadamente.

A pesar de que en la escena se recuperaron como evidencia unos 390 casquillos de diferentes calibres, no se reportaron heridos.

La noche de la fiesta de cumpleaños en la que fue asesinado un joven y otras tres personas resultaron heridas, se ocupó una guagua Dodge RAM 1500, del 2021, color gris, que aparece registrada a nombre del cantante, rapero, trapero y compositor Bryant Myers, cuyo nombre de pila es Bryant Robert Rohena Pérez y quien espera por ser entrevistado como parte de la pesquisa.

Entre las acciones que se tomarán se activó a la Policía Municipal de Canóvanas en turnos de 12 horas para garantizar su presencia constante en las zonas de mayor incidencia criminal. Tras cancelarse las vacaciones del personal, los efectivos totalizan 12, para trabajar en conjunto con el Negociado de la Policía de Puerto Rico (NPPR) en este período crítico.

“La comunidad siente mucho temor, ayer (miércoles) de forma confidencial se reunieron con esta servidora y nosotros hemos estado atendiendo esta situación. Esto no es porque ocurrió un tiroteo el lunes, y quiero aclarar que nosotros hemos tenido una colaboración enorme de la Policía de Puerto Rico, pero estos grupos que son unos irresponsables, no tienen temor de nada. La mayoría son jóvenes, yo creo que ninguno pasa de 21 años y yo quiero que ellos sepan que nosotros sabemos quienes son y que vamos a ir tras ellos porque es una comunidad completa, ellos abrieron fuego no solamente contra el negocio... ellos le tiraron allí a todo el mundo... y eso aquí no lo vamos a permitir”, sentenció Soto Villanueva, en una rueda de prensa.

Según su explicación, los sicarios fueron a darle un aviso a alguien del área del negocio por una situación particular que cree que es conocida por todos en esa comunidad, pero tienen miedo de hablar. “Yo creo que esto tiene que ver con control de puntos, trasiego de drogas, de delincuentes que no respetan la vida de nadie y todo el mundo lo sabe, pero no dicen quién es”.

Por su parte, el comisionado del NPPR, Antonio López Figueroa, y su equipo de trabajo tras una reunión convocada de emergencia por la alcaldesa, confirmó que tienen identificados a los integrantes de grupos criminales que ha generado violencia en las pasadas semanas, la cual podría extenderse a Carolina y San Juan.

“Yo lo que le digo a la ciudadanía es que van a ver resultados pronto, como dijo la alcaldesa tenemos a las personas plenamente identificadas. Se ha estado trabajando, se va a trabajar para tener los planes de trabajo para reducir la incidencia de crímenes violentos en el área de Canóvanas, Carolina y San Juan, todo esto va de la mano”, señaló López Figueroa.

Se anunció un aumento en las rondas preventivas en las comunidades, la Implementación de intervenciones de tránsito y encuentros con líderes comunitarios, comerciantes y grupos religiosos para escuchar sus preocupaciones y recomendaciones, los cuales ya comenzaron ayer.

Se comprometieron a trabajar para levantar información de inteligencia y analizar los índices de criminalidad para identificar potenciales brotes de violencia y combatir que se cometan delitos con tecnología avanzada.

Soto Villanueva solicitó la cooperación de agencias de gobierno que están encargadas de otorgar permisos para la operación de negocios, de la fiscalía y organizaciones no gubernamentales para llegar raíz de los problemas sociales, entre otros recursos.

Además, urgió la intervención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas y de la Agencia federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, en inglés) con personas que no tienen residencia que “no permiten que la gente allí duerma, operando galleras, casinos y negocios clandestinos y están viviendo allí y no respetan a sus vecinos que llevan 30 años viviendo allí”. Puntualizó que también brindan ayuda a aquellos ciudadanos que por su conducta quieren adquirir la ciudadanía americana. Particularmente esta situación ocurre en el área de Las Villas del barrio San Isidro.

Se enfocarán en la prevención, a través de talleres educativos para los policías de la comunidad, comenzando con los campamentos de verano y los empleados municipales, al reconocer que no todas las soluciones están en manos del NPPR.

La alcaldesa hizo un llamado a la ciudadanía a colaborar para reportar cualquier actividad sospechosa o información relevante a las autoridades correspondientes.

“Asimismo, instó a la comunidad a mantenerse alerta y a seguir las recomendaciones de seguridad proporcionadas por la Policía Municipal y estatal. Se destacó la importancia de no asumir riesgos y de utilizar la línea del sistema de emergencias 9-1-1 para reportar casos”, sostuvo la funcionaria, en un comunicado de prensa.

Finalmente, Soto Villanueva invitó a los ciudadanos a integrar a sus hijos en los programas educativos que ofrece el municipio, los cuales abarcan una amplia variedad de disciplinas para niños y adolescentes.

“Tenemos un compromiso de velar por la seguridad y el bienestar de los ciudadanos de Canóvanas y enfatizó en que la colaboración de la comunidad es fundamental para prevenir el crimen y restablecer la paz en las comunidades”, enfatizó al tiempo que reconoció que en ocasiones los líderes recreativos y empleados municipales que se han topado con delincuentes que han intentado amedrentarlos.

En las comunidades directamente afectadas viven poco menos de 5,000 personas y en el barrio San Isidro totalizan las 18,000.