La ola de ausencias en las filas de la Policía este fin de semana, en protesta por los recortes de pensiones y las malas condiciones laborales, ha forzado a los municipios a hacer toda clase de ajustes para poder mantener la seguridad en las calles.

De hecho, también en las filas de las policías municipales se reportan ausencias en masa, aunque no parece haber llegado al nivel que está afectando a la policía estatal, donde se han llegado a reportar cuarteles cerrados.

En San Juan, el comisionado de la Policía Municipal, coronel José Juan García, explicó que se han mantenido abiertos y atendiendo al público los 11 cuarteles. No obstante, indicó que se viene reportando un promedio de 22 ausencias por cada uno de los tres turnos de trabajo.

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Agregó que “la unidad de impacto no compareció, se reportó enferma”, aunque aclaró que es una unidad especializada, aparte de los precintos, que se activa para atender situaciones extremas.

Explicó que en un día normal, lo habitual suelen ser que se reporten unas 10 a 12 ausencias por turno, “así que serían como 10 ausencias más de lo que comúnmente tenemos a diario”.

“¿Cómo lo estamos manejando? Pues tengo personal administrativo, de la oficina auxiliar, de las unidades de investigación, de operaciones de campo, personal que normalmente está en otras funciones pues los tenemos para reforzar donde haga falta. Y puedo decir que con lo que tenemos, estamos funcionando”, afirmó el coronel.

García agregó que han estado dando apoyo a la Policía estatal en el área de San Juan, ya que “ellos tienen un problema mayor, tienen cuarteles cerrados”.

“Por ejemplo, en Puerto Nuevo, no tenían personal suficiente y estaban refiriendo esas querellas, y las estamos atendiendo. Es para poder reforzar y ayudar al funcionamiento”, explicó.

Añadió que la Policía Municipal de San Juan ya tenía de antemano un operativo especial para la noche de Halloween, así como la atención y labores de prevención en otras actividades como el encendido navideño que hará el municipio esta noche en la Plaza de Armas.

“Vamos a seguir atendiendo, dando prevención, atendiendo querellas, en las actividades”, afirmó el coronel.

Indicó que para las últimas horas se había reportado un asesinato en el área de San Juan, “pero eso no tiene que ver con la situación de la Policía. Eso es parte de situaciones que son lamentables, pero ocurren de ordinario”.

Opinó que es algo que “podría tener relación al evento de protesta de los policías. Y algunos lo han expresado públicamente”. Sin embargo, aclaró que, “si es que se tiene que revisar algo, se hará después, según los procesos”.

Mientras, en Dorado, el alcalde Carlos A. López, comentó que “hemos tomado medidas para atender con la Policía Municipal, para garantizar la seguridad y atender las actividades, que son diversas, que se están llevando a cabo en nuestra jurisdicción”.

Agregó que habían planificado de antemano para poder enfrentar la situación de ausencias que se esperaba, “y hasta ahora todo está bajo control”.

“El plan que trazamos está funcionando”, insistió el alcalde.

Sin embargo, López fue enfático en su solidaridad hacia los agentes de la Policía y condenó que se les esté recortando sus pensiones.

“Lo primero que tengo que mencionar es que el reclamo de los compañeros policías estatales debe ser atendido. Es inhumano, injusto, insensible lo que está pasando con ellos. Son trabajadores que se esfuerzan, que arriesgan su vida, para que cuando se retiren tengan una pensión de hambre”, condenó.

Comentó que la Policía Municipal de Dorado “no tiene esa situación con relación a la pensión” porque están bajo el sistema de los empleados municipales. Pero insistió que “estamos solidarios todos porque entendemos que es injusto lo que están haciendo con la policía estatal”, y llamó a la Legislatura, el gobierno y en particular la Junta de Supervisión Fiscal a “buscar una solución a este problema”.

En tanto, en la montaña, también se estaba sintiendo el problema de la ausencia de agentes de la Policía.

En Comerío, explicó el alcalde José A. “Josean” Santiago, “lo que hicimos fue que el comisionado de la policía municipal se comunicó con el teniente de distrito de Comerío, y activamos la poca policía municipal que tenemos, que son cinco, para ayudar”.

De acuerdo con Santiago, para la mañana de hoy, sábado, solo se habían reportado a laborar “los tenientes, un sargento y un agente. Eso es todo lo que tenemos”.

Sin embargo, Santiago explicó que “en municipios como el nuestro, pueblos pequeños, con poca incidencia criminal, lo habitual es que hay turnos, con mucha frecuencia, con un solo agente en la calle y uno en el retén. Así que no hay mucha diferencia”.

Sostuvo que ayer habló con el comisionado de la Policía, Antonio López, “y le dije que apoyo los reclamos de la Policía. Pero también tenemos que velar por la seguridad. Así que me ponía a su disposición con la policía municipal, manejo de emergencias, con lo que pudiéramos”.

Sin embargo, Santiago comentó que esa falta de policía está creando situaciones no deseadas. “Hace un momento estaba leyendo la queja de una ciudadana del centro urbano, que anoche no pudieron dormir, porque había un voceteo y gente bebiendo en las afueras de una gasolinera hasta las 5:00 de la mañana. Llamaron a la Policía, y no respondió nadie”.

“Ella me pide dice que haga algo. Yo hice una ordenanza, ordenando el cierre de negocios a las 12:00 de la noche los siete días de la semana. Pero en esas estaciones operan todo el tiempo, y se quedan allí bebiendo afuera, aunque eso lo prohíbe el código de orden público, prohíbe ruidos innecesarios y beber fuera de negocios. Pero si no hay policías, no se puede hacer valer el código de orden público, no se puede multar a nadie”, lamentó, agregando que, además, si lo que hay es un solo agente como ocurre con frecuencia, va a ser muy difícil que pueda intervenir con “un grupo de personas, bajo efectos de bebidas, y sabemos que hay gente armada por ahí. El agente expone su vida en una situación así”.

“La Policía tiene que atender ese problema de la cantidad de agentes disponibles, más allá de la situación de este fin de semana. En los pueblos pequeños de la montaña con baja incidencia criminal estamos teniendo el problema de muy pocos oficiales por turno disponibles. En el mejor caso, habrá cinco o seis en un turno, y eso no es razonable. No pueden hacer el trabajo efectivamente con esa limitación”, insistió Santiago.

Por otro lado, al menos tres alcaldes habían emitido órdenes de emergencia ante la situación de ausencia de policías.

El alcalde de Ponce, Luiz Manuel Irizarry Pabón, firmó una orden ejecutiva a esos efectos, que tiene efecto hasta la madrugada del lunes. En la misma, obligaba la activación de la Policía Municipal en periodos de 12 horas, y suspendía las licencias de vacaciones y tiempo compensatorio a decenas de efectivos.

De igual forma, la alcaldesa de Barceloneta, Wanda Soler, y el alcalde de Quebradillas, Heriberto Vélez, firmaron órdenes ejecutivas declarando un estado de emergencia por la falta de policías, y activaron a sus respectivas policías municipales en turnos de 12 horas.