La vista preliminar en alzada contra Eduardo Meléndez Vázquez, enfermero acusado de asesinar al biólogo marino Robert Viqueira Ríos en julio, continuará mañana, miércoles.

Meléndez Vázquez, quien durante la vista estaba mayormente cabizbajo y con las manos juntas, enfrenta cargos por el artículo 6.14 B de la Ley de Armas (disparar o apuntar con un arma de fuego); por el artículo 95, asesinato atenuado; escalamiento y cargos por tentativa de asesinato contra la esposa de Viqueira Ríos, Moshayra Vicente Cruz.

Todo ocurrió el 15 de julio, en la calle Star, de la urbanización Estancias de Yidomar, en Yauco, cuando Meléndez Vázquez, de 45 años, presuntamente le disparó a Viqueira Ríos tras una disputa vecinal.

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Acorde a lo que ya se había revelado en la pesquisa, el altercado surgió por la colocación de una bocina en el techo de la casa de Meléndez Vázquez que emitía el canto de coquíes.

Otra vista polémica

Previo al receso de almuerzo, la vista se caracterizó, así como las anteriores, por ser contenciosa.

Inicialmente, el abogado Adan Rivera Ramos intentó, durante el contrainterrogatorio con Vicente Cruz, establecer que la víctima estaba alcoholizada desde las 4:30 p.m., unas siete horas antes del incidente.

“Esto no es un caso de embriaguez contra la víctima. No nos podemos desenfocar. Estamos en un caso de asesinato. Yo tengo objeción, porque es impertinente esa línea de preguntas”, insistió la fiscal Limarí Cobián Lugo.

Tras múltiples objeciones, Rivera Ramos cuestionó cuándo fue que Viqueira Ríos se armó, intentando establecer que era a las 7:20, hora que coincide cuando Viqueira Ríos comenzó a lanzarle palabras soeces al vecino, Meléndez Vázquez, por el alto volumen del sonido de los coquíes.

Cobián Lugo objetó, pues decía que no fue algo cuestionado en la vista anterior. El juez Gian García García, quien presidió la vista en el Tribunal de Ponce, permitió que la defensa continuara, ya que esos detalles sí se incluyeron en la declaración jurada.

“Desconocemos, su señoría, pero relacionado a eso, lo que yo quiero indicarle a su señoría es que independientemente lo que diga la declaración jurada, lo que el Tribunal debe tomar en consideración es lo que ocurre en la vista si él (Rivera Ramos) puede o no puede hacer preguntas relacionadas a lo que fue objeto del directo de la vista que está ante su señoría”, dijo Cobián Lugo.

“Fiscal, fiscal, este juez sabe lo que va a tomar en consideración y qué no. Yo le voy a solicitar, respetuosamente…desde esta mañana le está diciendo al Tribunal lo que debe hacer el juez”, tronó el juez.

“No, no”, refutó la fiscal.

“No, no, sí. Y, me parece a mí sumamente impertinente vamos a centrarnos en el caso. El juez conoce su trabajo, usted conoce el suyo, la defensa conoce el suyo. Vamos a centrarnos y respetarnos mutuamente para que este caso pueda surgir y pueda repercutir en una determinación, porque realmente si usted sigue insistiendo en lo que debe decidir el juez o lo que debe hacer o lo que debe trabajar el juez, entonces le pregunto, ¿para qué estamos aquí?”, reiteró el magistrado.