Cerca de una treintena de estudiantes, en su mayoría graduados e internacionales, realizaron una protesta esta mañana frente a la Torre del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR) repudiando lo que catalogan como desahucio de las residencias universitarias a dos semanas del inicio de clases.

“¿Dónde estudio? ¿Dónde duermo? En la calle no estoy contento”, coreaban al son de pleneras mientras cargaban pancartas que leían “Hasta el rector tiene casa en el recinto”, “Desahuciados por la UPR”, “Homeless International Student in UPR” y “Don’t play with students careers”.

Por años, los estudiantes que habían obtenido un espacio en las residencias Torre Norte y Resi Campus solo tenían que pasar por una revisión para mantenerse viviendo allí mientras completaban sus grados universitarios, asegurando que cumplían con el criterio de necesidad económica y de residencia fuera del área metropolitana. Una vez se volvían a repartir los espacios, entonces se repartían los sobrantes entre los de nuevo ingreso.

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Este año, explicó Jonathan Cruz, quien completa una maestría en Humanidades, se les ha denegado el hospedaje a la mayoría de los estudiantes residentes que llevan vario años allí. A muchos, se les ha notificado que deben desalojar el espacio antes del 31 de julio y a otros no se les ha enviado comunicación alguna.

La principal queja es que muchos todavía no saben si contarán con un techo subsidiado por la universidad cuando inicien las clases el 10 agosto y otros señalan que, además de que la denegación del espacio en la residencia es injusto, se les ha avisado muy tarde.

“A esta fecha, los apartamentos que se pueden conseguir cerca de la universidad son los más sucios, los más inseguros o los más caros”, señaló Cruz. 

La situación, aseguran, es aún más grave para estudiantes internacionales como Sita Dugu, de Nepal, quien completa un doctorado en Física, y Xian Wang, de China, que estudia Ciencias Ambientales, también a nivel graduado y que no dominan el español.

“No sabemos dónde vamos a vivir, por eso estamos protestando aquí. Estamos desamparadas”, indicó Wang en inglés. 

Como ellas, hay estudiantes de Venezuela, Guatemala, Colombia, Chile y Haití. 

Una representación del grupo se reunió con la decana de Asuntos Académicos, Palmira Ríos, quien funge como rectora interina.

Ríos indicó que el esfuerzo de la UPR por atraer más estudiantes ha significado un aumento en la cantidad de los solicitantes a residencia subsidiada por la Universidad. Señaló que la prioridad la tienen estudiantes con necesidades especiales y de salud, que tengan una necesidad económica de emergencia, que estudien por convenio, atletas y estudiantes de intercambio. A los estudiantes internacionales, se les ofrece por un semestre, dijo.

Precisó, además, que las residencias Torre Norte y Resi Campus cuentan con 702 camas disponibles y este año se han considerado entre 1,300 y 1,400 solicitudes. Añadió que la vivienda provista por la institución es una de carácter transicional, que sirve para apoyar el proceso de adaptación a la vida universitaria y que se trata de un contrato de un año, por lo que luego los residentes deben gestionar este asunto.

Para atender el reclamo de los que se manifestaron hoy, Ríos anticipó que la administración universitaria depurará las listas de admisión para eliminar a aquellos estudiantes que han desistido de estudiar en el recinto de riopedrense y ofrecer los espacios según la lista de prioridades.