La diócesis de Ponce de la Iglesia Católica instruyó a sus feligreses a no darse la mano ni abrazarse, esto como medida de precaución ante la influenza y “situaciones emergentes”.

En un comunicado con la firma del obispo de Ponce, Rubén González, se informa que la medida inicia el próximo domingo “consciente de la realidad de salud que afecta a nuestro pueblo, como medida de precaución, ante el brote de influenza en Puerto Rico y en prevención de otras situaciones emergentes”.

Solo en una semana, entre el 26 de enero y el 1 de febrero, se reportaron 1,554 nuevos casos de influenza, para cerca de 14,000 casos esta temporada. Asimismo, a nivel mundial hay mucha preocupación con la propagación del coronavirus, enfermedad que todavía no se ha registrado en la isla.

El obispo instruyó a que las medidas de precaución incluyen que “la comunión deberá recibirse en la mano””, y “no tomar directamente del cáliz”.

“De igual manera, el saludo de la paz se realizará mediante un gesto fraterno. Evitando el darse la mano o abrazo”.