Unos 220 kits de Narcan -antídoto que revierte los efectos en el cuerpo de una sobredosis por opioides, incluyendo el fentanilo- fueron repartidos este martes entre decenas de comerciantes del Viejo San Juan, a fin de garantizar el acceso rápido del fármaco en caso de que en medio de la celebración de las tradicionales Fiestas de la Calle San Sebastián se suscite alguna intoxicación por esta letal droga.

En total fueron 36 los dueños de negocios que aceptaron la invitación que le hizo el personal de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA) para recibir educación sobre las consecuencias nefastas del fentanilo, una droga que es adulterada ilícitamente en laboratorios clandestinos y que ha provocado la muerte en Puerto Rico de unas 2,813 personas entre 2016 y 2023.

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Según explicó Víctor Serrano, director de los Proyectos Especiales de Opioides de Assmca, es la primera vez que la agencia recurre a los comercios en medio de una actividad multitudinaria -el año pasado se estimó que cerca de medio millón de personas asistieron a las también conocidas Fiestas de la SanSe- para hacerlos parte de los esfuerzos de mitigación de muertes por sobredosis que se llevan a cabo localmente. La próxima actividad en la que se repartirán los antídotos será en las Justas de la Liga Atlética Interuniversitarias (LAI).

“Distribuimos el kit de Narcan a los comerciantes que consintieran recibirlo para tenerlo disponible en sus negocios con unos ‘stickers’ que también estarán indicando que ese comercio tiene disponible Narcan en caso de que haya un evento de intoxicación relacionado a estas sustancias... la idea es orientar a los comerciantes sobre lo que estamos viviendo con el fentanilo y la mezcla de diferentes sustancias con este potente opioide”, puntualizó Serrano al destacar que se visitaron negocios en la calle San Sebastián, la San Francisco, la Tanca, la Del Cristo y la Fortaleza, entre otras.

Subrayó que parte de la orientación a los comerciantes que, voluntariamente, accedieron a recibir los estuches es que el Narcan -fármaco que se utiliza vía intranasal- se debe aplicar “ante la mera sospecha de que hay una sobredosis”.

Entre los síntomas de intoxicación por fentanilo se destaca dificultad respiratoria, pérdida de conciencia y la pupila extremadamente pequeña como del tamaño de un alfiler.

“Esa triada de síntomas nos dicen que pudiera ser una sobredosis y ante la mera sospecha recomendamos el uso de Narcan y se alerta, inmediatamente, al 9-1-1″, sostuvo al insistir que es meritorio que la persona impactada sea revisada clínicamente.

Cada kit entregado gratuitamente contiene dos dispositivos intranasales. Las instrucciones detallan que, si la persona intoxicada no reacciona a la primera dosis luego de dos a tres minutos de aplicada, se debe dar otro tratamiento intranasal. “Si con esa segunda dosis tampoco responde y hay más Narcan disponible se puede utilizar”, agregó Serrano sobre el medicamento que bloquea los químicos de la familia de los opioides (heroína, oxicodona, morfina, fentanilo, entre otros) y evita que se adhieran a los receptores del sistema nervioso.

Actualmente, el Narcan se vende “over the counter” (sin receta médica) a un costo aproximado de $50. Según el funcionario, se hacen esfuerzos de política pública en la isla para que las aseguradoras lo incluyan en sus cubiertas.

Serrano enfatizó que el Narcan es efectivo para mitigar los efectos de opioides, pero no revierte el de otras sustancias como el alcohol o la xilacina. La xilacina, un potente tranquilizante aprobado para uso veterinario- es otra sustancia que trae de cabeza a las autoridades pues los consumidores lo mezclan para alargar y profundizar el efecto del fentanilo. Al no ser un opiáceo, no responde al Narcan.

En Puerto Rico, llamó recientemente la atención esta sustancia pues en el juicio contra el convicto boxeador Félix Verdejo trascendió que, aparentemente, se utilizó el relajante para drogar y causarle la muerte a Keishla Rodríguez Ortiz. Datos provistos por el Instituto de Ciencias Forenses (ICF) a Primera Hora indican que de un total de 227 muertes por intoxicación reportadas entre enero y agosto del 2023, el 8.81% se produjeron por mezclas de cocaína, fentanilo y xilacina; y un 5.73% por mezclas de xilacina y fentanilo.

“Lo importante es que se sepa que este es un ejercicio salubrista enfocado en derechos humanos... es una estrategia de reducción de daños y fatalidades”, insistió Serrano sobre las gestiones para prevenir las muertes a causa de esta droga (fentanilo) que provoca el deceso de casi 100,000 personas al año en Estados Unidos.

Añadió que el plan de la agencia es adiestrar a más de 23,000 personas sobre el manejo adecuado de una sobredosis y la administración de naloxona intranasal. A estos fines se han hecho colaboraciones con diversas agencias gubernamentales y organizaciones de base comunitaria.

El Plan de Saturación de Naloxona para Puerto Rico busca distribuir sobre 82,500 kits de Narcan y cerca de 10,000 Fentanyl Test Strips (FTS), unas tiras que detectan la presencia de fentanilo en las drogas ilícitas que se venden en la calle y que, a gran escala, se producen en China y son distribuidas a la isla y Estados Unidos desde carteles de México.

El secretario del Departamento de Salud, Carlos Mellado, aseguró esta semana en el programa Jugando Pelota Dura -el cual tuvo una edición especial abarcando el tema de la presencia de fentanilo en Puerto Rico- que en la isla se han distribuido unas 29,000 tiras de detección de fentanilo, principalmente, entre organizaciones sin fines de lucro que alcanzan directamente los espacios en los que se consume la droga.

De otra parte, Mellado expuso que también se entregaron unos 12,600 kits de Narcan entre agencias de primera respuesta, incluyendo manejo de emergencias municipales y ambulancias privadas.

Hasta diciembre de 2023, el 96% (4,070) de los 4,258 casos reportados en Assmca fueron eventos no fatales tras recibir una dosis de Narcan.

Sin embargo, el Sistema de Monitoreo de Sobredosis y Uso de Naloxona (SMES) de la ASSMCA refleja una tendencia en aumento en casos de sobredosis, particularmente, entre los grupos demográficos entre 24 a 54 años de edad.

Cabe destacar que la Ley 35 del 2021 (Ley para la Prevención de Muertes por Sobredosis de Opioides de Puerto Rico) protege a toda persona en Puerto Rico en un acto de “buena fe intervenga para ayudar a las víctimas de sobredosis” administrando un antídoto de opioide como la naxolona.