Trabajar en uno mismo es la tarea más gratificante a la que nos podemos lanzar. Esto va, desde ser honestos con nosotros mismos hasta conocer quienes somos verdaderamente. ¿Cuáles son nuestras limitaciones, cuáles son las fortalezas? ¿Cuál es nuestra naturaleza que no es solo física? Son algunas preguntas con las cuales podríamos comenzar.

De los ejercicios que más dificultad le causa a mis clientes de coaching es el reconocimiento de sus fortalezas. Parecería sencillo dar con nuestro carácter, sin embargo, entre las razones que lo dificulta está nuestra desconexión con nosotros mismos que entre otras razones, que surge cuando vivimos en una rutina, en automático. Las veces que pasamos por experiencias negativas, ponemos nuestras fortalezas en acción. Así mismo, a veces en el caminar del día se nos olvida que ahí están para usarlas en las situaciones no tan drásticas, que permiten que nuestro día sea mucho más relajado y organizado con solo activarlas.

También, cuando comenzamos a mirarnos para ocuparnos de los cambios necesarios, es común señalar todo lo que entendemos que no está bien. Por ejemplo, nos reconocemos perezosos, procrastinados o faltos de interés, mientras que nuestro carácter también se define por firmezas que nos hacen grandes personas. Al recordarlas, logramos mantener la autoestima saludable y nos damos la oportunidad de obrar desde nuestro carácter evolucionado.

Un buen ejercicio para descubrir o reforzar nuestras fortalezas es el siguiente:

Dibuja una tabla de tres columnas. Escribe los siguientes títulos para cada columna.

- Experiencia Negativa

- Lección aprendida

- Fortaleza

Llena cada columna con diversas experiencias, por lo menos diez. Al final encontrarás un listado de fortalezas en la columna tres que te definen. Al escribirlas en página aparte como adjetivo te darás cuenta de que te definen. ¡Ese eres tú! Eres tus fortalezas, están ahí para servirte, para ayudarte a ser tu mejor versión y guiar a otros hacia lo mismo.

Tenemos la opción constante de ser y actuar desde nuestras fortalezas o desde nuestras debilidades, escojamos bien, porque cada acción y cada reacción nos llevará a un resultado inevitable. ¡Adelante!

Ejemplo de fortalezas:

1. Perseverancia

2. Resiliencia

3. Amor

4. Paciencia

5. Persistencia

6. Valentía

7. Compromiso

8. Responsabilidad

9. Creatividad

10. Humildad

11. Respeto

12. Empatía