El 2020 acabó y las mujeres en el mundo lo despidieron como mismo comenzaron el 2021: agotadas. Las cuarentenas y las medidas de distanciamiento social confinaron a las personas a sus hogares, pero, principalmente, las mujeres, a quienes tradicionalmente se les han asignado las tareas domésticas y de cuidados, vieron sus jornadas de trabajo multiplicadas.

Obligadas a convertirse muchas en maestras para la educación a distancia y a hacerse cargo a tiempo completo de niños y adultos mayores, muchas tuvieron que renunciar a sus trabajos remunerados. Otras, fueron parte de la ola de desempleo que generó el cierre de comercios y espacios públicos.

Al final, la pandemia del COVID-19 generó un retroceso de más de una década en los niveles de participación laboral de las mujeres en la región latinoamericana, según el más reciente informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.

Sin embargo, en un año sumamente difícil para toda la humanidad, resaltan momentos claves de conquistas de derechos y más justa representación de las mujeres en distintos espacios.

La conversación sobre la necesidad de declarar un Estado de Emergencia

El reclamo que lanzó la Colectiva Feminista en Construcción en noviembre de 2018 para que el gobierno declarara un Estado de Emergencia por la crisis de violencia de género en Puerto Rico sumó más voces. Se convirtió en un tema de conversación de la campaña electoral y cuatro de los cinco candidatos se comprometieron con implementar una orden ejecutiva a esos fines. La consistencia de la organización colectiva permitió elevar la discusión sobre su importancia y sobre la necesidad de medidas concretas para atender la vida y seguridad de las niñas y las mujeres en Puerto Rico.

La pandemia del COVID-19 generó un retroceso de más de una década en los niveles de participación laboral de las mujeres en la región latinoamericana, según el más reciente informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
La pandemia del COVID-19 generó un retroceso de más de una década en los niveles de participación laboral de las mujeres en la región latinoamericana, según el más reciente informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe. (Shutterstock)

Esta conversación fue preámbulo a que el gobernador Pedro Pierluisi emitiera la orden ejecutiva que declara Estado de Emergencia por violencia de género el 25 de enero del recién comenzado año.

Mayoría de mujeres en el Senado

Si bien todas las mujeres en Puerto Rico tienen el derecho al voto desde 1936, cuando el sufragio se hizo universal, pasaron 85 años antes de que tuvieran en el Senado una representación equivalente al por ciento que representan en el país. En 2021, las mujeres ocupan 14 de los 27 escaños en la cámara alta de la Asamblea Legislativa.

Proyecto 85, una organización sin fines de lucro que promueve la equidad en los principales cargos electivos de Puerto Rico y que busca la participación de mujeres como candidatas políticas, resaltó el hito histórico que esta elección significó para las mujeres en la política.

En su informe de impacto, subrayó, asimismo, que aún queda mucho trabajo por hacer en espacios donde la representación de las mujeres es desproporcionadamente menor a la de los hombres, como en la Cámara de Representantes y las alcaldías.

Equipo Nacional de Baloncesto Femenino logra clasificación a los Juegos Olímpicos

Equipo Nacional de Baloncesto Femenino
Equipo Nacional de Baloncesto Femenino (Suministrada / FIBA)

El 9 de febrero de 2020, el Equipo Nacional de Baloncesto Femenino logró su primera clasificación a unos juegos olímpicos. La inédita gesta ocurrió en Bourges, Francia, donde las 12 jugadoras puertorriqueñas se enfrentaron a las delegaciones de Brasil, Australia y Francia.

Sin embargo, las atletas boricuas llevan años preparándose para esta oportunidad, subiendo el nivel del baloncesto de mujeres en la región con grandes demostraciones en justas centroamericanas, panamericanas y en la Copa del Mundo FIBA 2018.

La pandemia por COVID-19 aplazó los Juegos Olímpicos que se celebrarían en verano de 2020 en Tokio, Japón, pero las boricuas se mantienen firmes en sacar el máximo de la principal competencia internacional.

La victoria de las mujeres negras organizadoras del voto afroamericano y la elección de Kamala Harris como vicepresidenta de Estados Unidos

La entonces candidata demócrata a la vicepresidencia, Kamala Harris, durante suen la Marcha del Orgullo LGBTQ+ en San Francisco, California.
Kamala Harris, vicepresidenta de los Estados Unidos (Sundry Photography / Shutterstock.com)

Hija de inmigrantes de India y de Jamaica, y mujer negra, la elección de Kamala Harris como vicepresidenta de Estados Unidos fue una gran victoria en el 2020 en términos de poder y representación a nivel internacional.

Para la investigadora del Instituto de Estudios del Caribe y profesora en el Departamento de Ciencia Política de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, Melody Fonseca, es importante destacar que detrás de la elección de Harris hubo una movilización masiva de mujeres negras organizadoras del voto afroamericano, un bastión importante del partido demócrata.

“Es esta intersección de mujeres negras organizadoras lo que le da el espacio a Kamala Harris y a Joe Biden para que la gente confiara en esa papeleta”, estableció Fonseca.

Feministas negras, como la activista, filósofa y académica Angela Davis, han dejado claro que solo el hecho de que una persona sea mujer o sea afrodescendiente no es sinónimo de que va a actuar en los mejores intereses de los grupos que simbólicamente representa. Harris llegó a la papeleta demócrata con una carrera como fiscal de la que surgen actuaciones en defensa de políticas que afectan principalmente a las comunidades afroestadounidenses. Sin embargo, para Davis y otras líderes feministas negras, “es un enfoque feminista poder trabajar con esas contradicciones”.

La legalización del aborto en Argentina

Un día antes de que acabara el año, el 30 de diciembre de 2020, el Congreso de Argentina aprobó la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 14 de gestación. Anteriormente, solo era legal en casos de violación y de peligro de salud para la gestante, pero muy difícil acceder al procedimiento, aun en estas circunstancias. En la práctica, la ilegalidad promovía el aborto clandestino en condiciones inseguras que ha significado la muerte de miles de mujeres, según estimados del propio gobierno, que datan desde 1983.

La legalización es una conquista de la Campaña nacional por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito, que agrupa a miles de colectivos a través de toda la nación argentina, y que llevaba años reclamando el derecho por la decisión sobre el propio cuerpo, un asunto de derechos humanos y de salud pública.

Expertas en derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas elogiaron la legislación como un “paso histórico” que, esperan, convierta a Argentina en un modelo para toda América Latina, donde aún hay países que criminalizan la interrupción del embarazo en cualquier circunstancia.

La importancia de los avances colectivos

La Organización de las Naciones Unidas también presentó una lista de momentos definitorios para las mujeres en 2020, en la que incluye investigación que sugiere que los países liderados por mujeres, como Nueva Zelanda, Alemania, Finlandia y Bangladesh fueron más efectivos en atender con urgencia la pandemia por COVID-19, lo que significó menos contagios y menos muertes.

Menciona, además, la aprobación del parlamento escosés para hacer gratis para todas las personas los productos de gestión menstrual, incluyendo tampones y toallas sanitarias, en edificios públicos, incluyendo escuelas y universidades.

Otro avance se registró en Afganistán, donde, por primera vez, el nombre de las madres será incluido en los certificados de nacimiento de sus hijos y otras identificaciones.

Asimismo, dos mujeres, Emmanuelle Charpentier y Jennifer A. Doudna, ganaron el Premio Nobel de Química por su trabajo en una forma de editar ADN, conocida como Crispr-Cas9. Las dos científicas se conocieron en una conferencia en 2011 y tan solo un año después publicaron el artículo de su investigación en la revista Science.

Las investigadoras científicas Emmanuelle Charpentier y Jennifer A. Doudna, quienes se conocieron en una conferencia celebrada en Puerto Rico, ganaron el Premio Nobel de Química. Abajo, el Gobierno de Puerto Rico declara Estado de Emergencia ante el incremento de la violencia de género.
Las investigadoras científicas Emmanuelle Charpentier y Jennifer A. Doudna, quienes se conocieron en una conferencia celebrada en Puerto Rico, ganaron el Premio Nobel de Química. Abajo, el Gobierno de Puerto Rico declara Estado de Emergencia ante el incremento de la violencia de género. (Toma de video de AFP/Archivo de GFR Media)

Mientras, en octubre, líderes internacionales se reunieron para conmemorar el 25 aniversario de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, que se considera la hoja de ruta más completa para promover internacionalmente la equidad de género. Según ONU, más de 100 países se comprometieron con emprender acciones concretas para acelerar los trabajos hacia la equidad y el empoderamiento de las mujeres y las niñas en todo el mundo.

Para Irma Lugo Nazario, la coordinadora del Observatorio de Equidad de Género de Puerto Rico, una entidad que también se estableció en 2020, los pasados meses han sido difíciles, pero el reto mayor es mantener las ganancias conquistadas.

“No podemos soltar lo que ya tenemos. Tenemos que reconocer que la situación en 2020 y el comienzo de 2021 no ha sido fácil para las mujeres. Es importante que los logros que hemos alcanzado, los mantengamos y tenemos que seguir denunciando las brechas en salarios, la inequidad en los trabajos, los servicios, para poder avanzar hacia la equidad”, sostuvo Lugo Nazario.