El Equipo Nacional de Baloncesto de Puerto Rico volvió a sacar el lunes los pies de la clasificación a la Copa del Mundo 2023. Pero tiene cuatro partidos más a partir de noviembre para meterse de lleno en el Mundial.

Luego de caer vencido el lunes en la noche por final 78-70 ante Uruguay, y de completados todos los partidos de la primera ventana de la segunda ronda del sistema de clasificación al Mundial, Puerto Rico está quinto en el Grupo F con marca de 4-4. Los mejores tres equipos del Grupo clasifican a la Copa del Mundo que se realizará en sede compartida entre Indonesia, Japón y Filipinas.

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También está fuera del Mundial desde la perspectivas del standing global entre el Grupo E y F. Ahí ocupa el noveno lugar. El séptimo es el último espacio de clasificación.

Así las cosas, la situación vuelve a ser de presión, tal y como estaba previo a los últimos dos juegos del equipo en este pasado fin de semana.

“Es complicada la situación”, precisa el exarmador de la Selección Nacional, Edgar Padilla.

“Cada juego vale oro. Hay que ver si este mismo grupo de jugadores de ahora se va a poder quedar en los próximos cuatro juegos. Tenemos que mantener el mismo equipo para darle continuidad del desarrollo de esa química”, agrego Padilla consciente de lo difícil que han sido las convocatorias.

Al día de hoy los clasificados de América son Canadá, Venezuela, Argentina, Estados Unidos, Brasil, México y República Dominicana.

Para que Puerto Rico agarre una posición de clasificado tiene que avanzar dos puestos en su Grupo F, lo que no es difícil dada la cercanía de los equipos que están por encima de la Isla.

Puerto Rico está a medio juego de desventaja de Brasil, de México y Uruguay, así como de Dominicana, si se considera el standing global en el caso de los vecinos isleños y que son parte del Grupo E. Esos equipos, precisamente, son a los que ahora mismo Borinquen le disputa los puestos de clasificación.

Y Padilla entiende que Puerto Rico tiene el calendario más cómodo de todos los equipos.

“Puerto Rico es el que menos malo la tiene”, opinó.

Padilla lo cree así porque los próximos dos juegos de Puerto Rico son locales en noviembre ante Colombia y Uruguay. Termina jugando de visita dos encuentros ante Colombia y Brasil. Cree que Colombia es el más asequible y que Brasil es el más duro por ser local, aunque recordó que Brasil cayó el lunes de anfitrión ante México. Brasil lleva tres derrotas corridas.

“Esos dos juegos en Puerto Rico hay que ganarlos obligado. Tiene otro juego con Colombia y otro duro en Brasil”, dijo.

Puerto Rico no ha podido ganar partidos corridos en los primeros ocho juegos del proceso de clasificación.
Puerto Rico no ha podido ganar partidos corridos en los primeros ocho juegos del proceso de clasificación. (Carlos Giusti/Staff)

Los otros equipos tienen calendarios más difíciles, sobre todo Brasil, que tiene dos encuentros con Estados Unidos, precisó Padilla. El otro equipo a quien le conviene el calendario es México, a quien le resta un juego ante Brasil y otro contra Colombia, más dos ante Uruguay.

El problema que tiene Puerto Rico es la tendencia que ha tenido en sus primeros ocho juegos de clasificación. Puerto Rico no ha podido ganar encuentros corridos en el proceso y Padilla cree que para clasificar no puede seguir así.

“Hay que ganar tres de cuatro juegos para estar en una buena posición. Puede ganar partidos corridos ante Colombia y Uruguay de local. Ahí hay dos. Y un tercero puede ser Colombia”, dijo.

La carencia de una racha de victorias de Puerto Rico es producto de los cambios de jugadores entre convocatorias, dijo Padilla. Por eso Padilla entiende que es necesario mantener el mismo grupo para ver si la continuidad produce consistencia y una racha.