Manila, Filipinas. Despedida agridulce de la Copa Mundial de Baloncesto FIBA 2023.

Puerto Rico tuvo el domingo el alcance para colarse a los mejores ocho equipos del certamen pero al final sucumbió contra Italia 73-57 en el partido de vida o muerte en el Coliseo Smart Araneta.

Los boricuas intentaban avanzar a los cuartos de final del magno evento por primera vez desde Indianápolis 2002. El sueño se quedó corto.

El Equipo Nacional puertorriqueño continuó sin descifrar a Italia en certámenes mundialistas, potencia europea que no derrota desde 1963 en este escenario.

Puerto Rico si logró terminar un Mundial con marca positiva (3-2) desde Indianápolis, cuando la edición de hace 21 años jugó para 6-3. Además, el seleccionado patrio podrá participar en el Repechaje Olímpico a celebrarse del 2 al 7 de julio del año entrante por un boleto a París 2024. Queda pendiente ahora al resto de los resultados de Italia y los demás equipos en el torneo para por medio del ranking conocer su posición final en el campeonato.

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El Equipo Nacional cayó vencido por final 73-57 en el partido que definía quien avanzaba a la ronda de los últimos ocho.

Tras cuatro puntos consecutivos de Romero para abrir el marcador en el importante choque, los italianos construyeron un avance de 15-0, con 10 unidades de Tonut, para tomar control de la acción.

Waters detuvo el “calentón” de los europeos con siete puntos consecutivos para mantener a los boricuas en juego. Sin embargo, el base titular erró en el manejo del balón con cinco de los seis errores de Puerto Rico.

Isaiah Piñeiro y el trainer José Cruz cargan a George Conditt hacia el banco luego de sufrir una torcedura de tobillo hacia la parte final del partido.
Isaiah Piñeiro y el trainer José Cruz cargan a George Conditt hacia el banco luego de sufrir una torcedura de tobillo hacia la parte final del partido. (Ramón “Tonito” Zayas)

Los primeros 10 minutos fueron a favor de Italia 25-15.

Al “Azzurri” se le perdió el aro en la segunda mitad y Puerto Rico aprovechó para acercarse 30-25. Aunque la puntería les falló, especialmente detrás del arco, preservó la ventaja al apoderarse del departamento de rebotes ofensivos, con 11 frente a uno sus rivales caribeños para 11 tantos en segundas oportunidades.

Waters dejó a Puerto Rico abajo por solo tres tantos (39-36) con una flotadora al sonar la chicharra después de un periodo ganado 21-14.

Italia solo tuvo tres triples en 17 intentos en la primera parte para un pobre 18 por ciento. Waters fue el mejor anotador de los boricuas con 10 tantos pero acumuló siete de los nueve errores del conjunto.

Jordan Howard toma un intento al canasto durante la acción del partido.
Jordan Howard toma un intento al canasto durante la acción del partido. (Ramón “Tonito” Zayas)

El mal momento de los italianos continuó en el tercer parcial y Puerto Rico también padeció en la ofensiva. Piñeiro conectó cesta que achicó la pizarra 41-40 con los dos equipos apenas combinándose para seis puntos en cinco minutos.

Un triple de esquina de Stephen Thompson Jr. dio la ventaja a Puerto Rico 43-41, la primera desde el 4-0 del primer parcial.

Puerto Rico celebró en el banco junto con sus fanáticos a su espalda. El sueño de ganar era realista.

Italia, número 10 en el escalafón mundial de FIBA, se encontró detrás del arco con triples consecutivos del veterano Luigi Detone (juego número 200 con la camiseta italiana) y Simone Fontecchio para despegarse 49-43.

Jordan Howard atinó un bombazo para dejar a los boricuas cerca en el marcador 51-47 camino al último parcial y el pase a cuarto de final en juego.

Un jugador italiano toma la gentileza al final del encuentro de ir a saludar a George Conditt en el banco. Estaba allí debido a una torcedura de tobillo que sufrió hacia finales del partido.
Un jugador italiano toma la gentileza al final del encuentro de ir a saludar a George Conditt en el banco. Estaba allí debido a una torcedura de tobillo que sufrió hacia finales del partido. (Ramón “Tonito” Zayas)

Italia salió fuerte en el último parcial con otros dos bombazos que elevó la delantera a doble dígito 57-47.

El tiempo continuaba descontándose en la pizarra y Puerto Rico no pudo salir del déficit de doble dígito, despidiéndose de la Copa del Mundo luego de un gran esfuerzo colectivo.

En los minutos finales, George Conditt IV salió lastimado del partido agarrándose el tobillo derecho. Fue asistido por sus compañeros y los trainers camino al banco.