David Stockton nunca se imaginó que terminaría jugando en Puerto Rico. La pandemia le alteró los planes, escuchó de la burbuja del Baloncesto Superior Nacional (BSN) del año pasado, vino a jugar y al parecer descubrió el encanto de la Isla, de lo competitivo de su baloncesto y del calor de su fanaticada, y ahora dice que le gustaría jugar aquí tantas veces como su agenda se lo permita.

Tan bien se siente en Borinquen que hasta le sugirió a su hermana que chequeara la liga femenina de Puerto Rico, y Laura Stockton ahora milita con las Montañeras de Morovis.

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“Yo fui el que le dije que Puerto Rico era espectacular y que le iba a gustar muchísimo jugar aquí. Para ella fue una decisión fácil”, contó antes de un partido reciente de Guaynabo.

“Me encanta la Isla. Trato de vivir la experiencia lo más posible. Ir a la playa con la familia, salir y disfrutar de la Isla porque el año pasado no pudimos verla mucho por la burbuja. Realmente me disfruto la comida, la cultura y todo lo que ofrece”, dijo el canastero de los Mets, que este año vino acompañado por su esposa y sus tres hijos, a los que les encanta estar en la playa.

Y ya que David se siente como en casa y con deseos de venir cada año junto a su familia, y con Laura sudando la camisa de las Montañeras, el próximo paso era una reunión boricua con su legendario padre, algo que ocurrió el sábado durante el Juego de Estrellas del BSN en Arecibo.

David Stockton, al centro con el balón, tuvo la oportunidad el sábado de participar el Juego de Estrellas del BSN mientras su legendario padre, John Stockton, le observaba desde las gradas.
David Stockton, al centro con el balón, tuvo la oportunidad el sábado de participar el Juego de Estrellas del BSN mientras su legendario padre, John Stockton, le observaba desde las gradas. (Suministrada / BSN)

“Mi padre nunca ha venido. Pero tengo entendido que viene para el Juego de Estrellas y que estará aquí unos días”, dijo David temprano esta semana.

Y así fue. El legendario armador, líder de asistencias y cortes de balón en la historia de la NBA, miembro del Dream Team y escogido como uno de los mejores 50 jugadores en la historia de la liga, se sentó sonriente en las gradas de la Manuel ‘Petaca’ Iguina a ver a su hijo participar en el concurso de canastos de tres puntos, y luego sudar la camiseta con el Team Benito en el choque estelar.

Durante los próximos días aprovecharía para ver a su hija Laura en acción con las Montañeras de Morovis.

A David le encanta tanto Puerto Rico que consiguió convencer a su famoso padre de venir. De hecho, David vive agradecido de la oportunidad que le dieron los Mets.

“Escuché que el BSN iba a hacer la burbuja en un momento en que no se sabía cuando arrancaría la G League y las otras ligas del mundo, y esta organización (Mets) me dio la oportunidad. Nunca había jugado aquí antes, pero ellos entendieron que jugaba bien y vine a la burbuja. Obviamente tuvimos éxito (el año pasado) y tuve la oportunidad de volver a firmar con el equipo”, dijo antes de un juego reciente.

Aunque trata de labrarse su propio camino, el apellido pesa a través del mundo.

Así, su ruta le ha llevado a probarse en la NCAA con la Universidad de Gonzaga y aunque no fue seleccionado en el Draft de la NBA, tiene un poco de experiencia con los Kings de Sacramento y el Jazz de Utah de la NBA. Además ha jugado con el Reno Bighorns, los South Bay Lakers y con el Memphis Hustle de la G League.

A nivel internacional estuvo con el Cedevita Zagreb de Croacia, con los New Zealand Breakers de la NBL de Nueva Zelanda y con el Medi Bayreuth de la Basketball Bundesliga de Alemania.

Dice que se ha adaptado el estilo de juego del BSN, no tan parecido al sistema de las ligas europeas y sí más al ‘run and gun’ estadounidense. Tan bien se ha adaptado que es el segundo mejor anotador del torneo con 471 puntos y media de 21.4 puntos, es el líder de asistencias con 163 y media de 7.4 por partido y además figura como el mejor tirador de tres con 58 triples en 22 juegos y el tercero en tiros libres anotados con 91 en 22 partidos. Fue seleccionado al Juego de Estrellas.

“El BSN tiene sus momentos. Hay veces en que se juega sistema, pero en la manera en que nuestro equipo y muchos otros en la liga deciden correr de lado a lado, con un juego rápido y excitante, es parte de esta liga y una de las razones por las que a los fanáticos y a mí nos gusta”, indicó Stockton.

“En contraste con otras ligas del mundo, Puerto Rico en general tiene gente a la que realmente les importa el juego y saben mucho. A dondequiera que vayas, ganes o pierdas, realmente te apoyan, y si juegas duro te tratan con respecto. Siento mucho cariño para la gente aquí y he disfrutado mucho jugar en la Isla. Me han tratado de forma fantástica”, finalizó.